El año académico llega a su fin. Las últimas evaluaciones y repasos dejaron su huella, los niveles de estrés llegaron a su máxima expresión, la rutina académica empieza a desinflarse y solo se piensa en las vacaciones

18 de diciembre de 2023, 9:55 AM
18 de diciembre de 2023, 9:55 AM

El año académico llega a su fin. Las últimas evaluaciones y repasos dejaron su huella, los niveles de estrés llegaron a su máxima expresión, la rutina académica empieza a desinflarse y solo se piensa en las vacaciones.

“Ya no quiero hacer nada, sólo dormir”, “estoy molido, no puedo esperar para agarrar el ‘play’”, “voy a aprovechar para viajar toda la vacación y sólo regresaré para inscribirme”, son frases que se escuchan en los pasillos y los patios de las universidades.

Sin embargo, los estudiantes pueden aprovechar este descanso pedagógico para experimentar y aprender más sobre ellos mismos y sus intereses.

“Existen diferentes técnicas que los estudiantes pueden utilizar a nivel académico como realizar mapas mentales, fichas de resumen, entre otras. Pero al referirnos a las vacaciones, estamos hablando de un tiempo de descanso, un tiempo de relajación que los saques de la rutina académica, que tuvieron durante el periodo educativo, por lo que se deberá buscar aprovechar ese tiempo para el descanso efectivo”, explica Zulma Aliaga, docente de la carrera de Derecho e integrante de la Jefatura de Enseñanza y Aprendizaje (JEA) de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.

La experta indica que, en este entendido y considerando que todas las actividades innegablemente generan aprendizaje a través del conocimiento, los estudiantes pueden aplicar metodologías basadas en la experimentación.

“En sus diferentes viajes y paseos con amigos y familiares, los estudiantes podrán observar y percibir diferentes situaciones, en las que desarrollarán un aprendizaje cargado de emociones y éstas, a su vez, se quedarán en la memoria de cada uno de ellos, siendo la base para lograr un conocimiento significativo”, agrega. 

Para Aliaga es importante que el estudiante valore y administre adecuadamente el descanso pedagógico, ya que la mente y el cuerpo sufren un desgaste natural que se puede ver aún más afectado por situaciones de estrés y ansiedad.

“No olvidemos que, finalizando el semestre, se presentan diferentes defensas y evaluaciones que involucran un necesario repaso de todo lo aprendido en este período, por lo que el estudiante tiende a poner el máximo de su esfuerzo para lograr una valoración óptima a nivel académico. Por ese motivo, el descanso debe darles un tiempo de distensión, con actividades recreativas, que les permitan recargar energías, despejar la mente, y retomar las clases con actitud positiva”.

Sobre este punto, Tatiana Montoya, docente en Unifranz, indica que, a nivel neurológico el descanso en las vacaciones es sumamente importante ya que los niveles de estrés constantes suben de manera significativa el cortisol, mismo que desestabiliza los neurotransmisores de serotonina y dopamina produciendo estados ansiosos y depresivos.

“En este sentido, el descanso y las vacaciones influirán, definitivamente, en el rendimiento académico”, agrega.

Unifranz

Los estudiantes deberían aprovechar ese tiempo que muchas veces tenemos limitado por las actividades académicas

Actividades

Aliaga recomienda a los estudiantes aprovechar las vacaciones para realizar actividades al aire libre, aprovechar las experiencias que les ofrece el entorno, empaparse de las necesidades de la sociedad y aprovechar la conexión con el entorno para generar propuestas en sus carreras.

“Los estudiantes deberían aprovechar ese tiempo que muchas veces tenemos limitado por las actividades académicas. Estas actividades pueden lograr experiencias que nos brinda el entorno mismo, recordemos que la formación de los futuros profesionales está en función a las necesidades de la sociedad y esta conexión con su entorno puede ayudarlos a generar propuestas en sus diferentes carreras, siempre y cuando analicen dicho entorno desde una perspectiva crítica y reflexiva”, dice la académica.

También se puede trabajar en desarrollar hábitos de lectura, ver películas o series relacionadas con el ejercicio de la profesión que estudian, entre otras actividades.

“Siempre es recomendable desarrollar hábitos de lectura, no necesariamente de su carrera, pero sí es importante ir revisando casos, hechos, noticias que sean de su interés, ya que así generará automotivación. No está demás ver películas o series relacionadas al ejercicio de su profesión a efecto de aplicar la comparación con la realidad de nuestro país y de esa forma revisar los conocimientos adquiridos en este período académico”, acota.

Reflexión

La experta señala que durante las vacaciones el estudiante no dejará de pensar en sus proyectos a futuro, porque su mismo círculo social y familiar mantiene una conversación constante sobre este tema.

Por lo que será importante que vaya revisando sus planes de estudio para visualizar las asignaturas que desarrollará en el siguiente semestre y tal vez indagar un poco con ayuda del Internet a efecto de generar conocimientos básicos y analizar de forma crítica sus fortalezas y debilidades para estar preparado frente a los retos que involucran el avanzar en su carrera profesional.

“En este punto siempre es bueno sugerir que vayan revisando el entorno laboral de acuerdo a sus respectivas carreras, para analizar desde el curso en que se encuentren, hacia dónde quieren dirigir sus estudios y buscar una especialidad. También es importante que administren su tiempo de ocio, ya que es recomendable que establezcan horarios flexibles para todas sus actividades desde dormir, levantarse, jugar, realizar ejercicios, paseos, entre otras actividades”, puntualiza.