El actor de la más reciente película de Larraín cuestiona a sus compatriotas

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15 de julio de 2017, 20:44 PM
15 de julio de 2017, 20:44 PM

"Siempre supe que 'Neruda' iba a ser muy criticada, porque los chilenos no sabemos lidiar con la
ficción", afirma Luis Gnecco, el actor que encarna al más influyente poeta del siglo XX, en la película homónima dirigida por Pablo Larraín.

Gnecco (Santiago de Chile, 1959) es uno de los cinco nominados a la Mejor Interpretación Masculina en los Premios Platino 2017, que se entregarán el día 22 en Madrid, por su papel protagonista en el
filme "Neruda", una coproducción de Chile, Argentina, España y Francia.

En competencia

El largometraje, que opta a un total de cinco Premios Platino, entremezcla el humor, la sátira y el género policial al narrar la persecución que sufrió Neruda en Chile entre 1947 y 1949, después de acusar al Gobierno del presidente Gabriel González Videla (1946-1952) de traicionar al Partido Comunista, en el que militó.

"Muchos factores hacen que esta película haya sido un éxito fuera de Chile más que dentro,  curiosamente. Pero no me extraña que sea así", sostiene el actor, quien se enfrentó a los críticos por
"desidealizar" la mítica figura de Pablo Neruda. 

"En Chile no lidiamos bien con nuestra ficción, somos muy básicos. La gente pretendía que esta fuera una suerte de 'docureality', pero para eso es mejor ver una película en History Channel", asevera.

Su propia versión 

Gnecco, que ha visto la película más de veinte veces y, dice, aún se sorprende, asegura que él mismo tuvo que despojarse de todo lo que conocía del Nobel de Literatura, con el propósito de volver a
estudiar cada detalle de su vida y del período histórico, además de engordar doce kilos.

"Yo hice mi versión de Neruda, le puse mi voz, mi cuerpo. Para eso tuve que olvidar lo que sabía o pensaba de Neruda. Todos tienen una imagen distinta de él, por tanto lo que vean nunca será lo que
se imaginaban", explica. 

El intérprete revela que en este proyecto confió "a pies juntillas" en el cineasta Pablo Larraín, un artista de talla mundial que a su juicio invita a los actores a "descubrirse y abandonarse", dejando de lado los tradicionales roles esquemáticos y aprendidos. 

Agrega que los Platino, entre otras plataformas, permiten unir al mundo cinematográfico iberoamericano, que en su opinión, "gusta mucho" de las producciones chilenas. 

"La forma en que vemos nuestras historias, cómo las contamos, la forma en la que hablamos, el color de la luz, todo eso es parte de nosotros. Aparentemente se ve bien, se vende bien y gusta", sostiene.
   Gnecco logró un gran reconocimiento y popularidad por sus personajes de humor en las teleseries, pero remarca tajantemente que sus proyectos en la televisión chilena son "solo para vivir".