En el circuito Vertical Route experiencias extremas de altura se viven en la ruta a Coroico

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4 de junio de 2017, 4:00 AM
4 de junio de 2017, 4:00 AM
Fotos: Archivo de Vertical Route /Boltur

Desciende por las montañas en rappel o por vía ferrata, camina por el cielo sobre el puente tibetano, vuela encima de magníficas vistas e increíbles paisajes, de forma divertida y segura con la tirolesa y finaliza con un espectacular vuelo en el columpio de cuerda. Esto y más es posible experimentar en el Vertical Route, un circuito manejado por las comunidades de San Juan de la Miel y Villa Ascensión, de Nor Yungas, en el departamento de La Paz.  

Adrenalina pura. Una increíble e inolvidable experiencia. Totalmente segura. La mejor de las aventuras extremas como para volver una y mil veces. Así describen las personas que han realizado este circuito vertical en una de las rutas más impresionantes que hay en el país, como es la carretera Chuspipata, camino a Coroico, a 3.000 metros de altura sobre el nivel del mar, considerada la más alta del mundo. 
“Es un circuito que emociona de principio a fin. No puedes creer de lo que eres capaz hasta que tienes una experiencia vertical route. Es 100% recomendable”, manifiesta Janneth Oliva, en la página de Tripadvisor.

Claudia Véliz, jefa de Ventas del servicio turístico Vertical Route, afirma que está considerado uno de los mejores circuitos de deportes extremos, ya que la carretera es única, solo utilizada por ellos y por los mineros de la zona. Fue construido en 2011 por técnicos españoles, encabezados por Didac Cabanillas, con una calidad única y el mayor despliegue de seguridad con anclajes y cuerdas.

“Vertical Route está considerado por Tripavisor, como uno de los mejores atractivos en Bolivia y en el país ha sido catalogado como el mejor, el más completo y el más barato. Hemos ganado premios por saltos, durante dos años consecutivos como deporte de aventura. Esto es full aventura y full adrenalina. Lo mejor de todo es que puede ser de gran ayuda para chicos o personas que tienen traumas de miedos o fobias. Para ello contamos con guías muy bien capacitados. Es sensacional”, remarca Claudia. 

Una gran aventura
Liliana Véliz, jefa de Marketing y Publicidad de Vertical Route, reta a los corajudos a disfrutar de una aventura realmente extrema durante seis horas de recorrido, que cuenta con rappel, vía ferrata (caminos de hierro), puentes colgantes de 30 metros, tirolesa de 100 metros de largo y un columpio armado con cuerdas que se balancea al atar el extremo de un cordón a una estructura elevada.

Explica que el circuito comienza con un descenso de 15 metros por cuerda conocido como rappel, en donde se inicia el emocionante trayecto del puente tibetano de unos 30 metros de largo y prosigue con la vía ferrata que consiste en caminar por unos pasos de metal (grapas), constantemente asegurado a un cable de acero, llamado la línea de vida. 

Se asciende a 300 metros de la forma más segura y excitante para continuar con un descenso por medio del zip line de 100 metros de largo. Volando y disfrutando de la tirolesa más alta del mundo, sigue con otro rappel de 30 metros de largo y finaliza con una caída libre, en el rope swing. 
En el recorrido de esta impresionante aventura, con asistencia de guías especializados de Vertical Route, se practica un estilo especial de escalada en el que no es necesario tener ningún tipo de conocimiento de esta disciplina, dado que los expertos dan la asistencia con la máxima seguridad, señala Freddy Aparicio, director del servicio turístico y experimentado guía.

Las cinco actividades
Explica que el rappel es una técnica de descenso por cuerdas en superficies verticales mediante un sistema de freno, mientras que el zip line, conocido también como tirolesa, consiste en una polea suspendida por cables montados en un declive o inclinación. Se diseñan para que sean impulsados por la gravedad y para deslizarse desde la parte superior del cable hasta el otro extremo. 
El puente tibetano, explica, es un armazón colgante formado por tres cables que crean un triángulo por el que se camina. Luego describe al rope swing como un columpio creado con cuerdas que se balancea al atar el extremo de una cuerda a una estructura elevada. Además, indica, se suele poner un nudo o un lazo en el otro extremo para evitar que se deshilache, ayudando a permanecer seguro.

Finalmente, señala que la vía ferrata es un recorrido vertical equipado con materiales, como clavos, grapas, presas, cadenas y cables con poleas que permiten llegar con seguridad a zonas de difícil acceso para senderistas o personas no habituadas a la escalada. La seguridad, remarca, se redobla con un cable de acero instalado en toda la vía y con el arnés.

Un lugar increíble
Didac Cabanillas, el español que hace seis años construyó el circuito, anima a los turistas, nacionales y extranjeros a hacer el circuito. Indica que son pocos los recorridos de este tipo que hay en el mundo, que cuenta con varias actividades. “Es una experiencia sin igual en un lugar increíble. Es ideal para entrar en contacto con los deportes extremos. Estoy seguro que les va a encantar”, finaliza con convicción.