Cómo logramos ser la ciudad más creativa

Todo camino comienza con un primer paso. Tina Hansen dio el primero de los que llevaron a Santa Cruz a convertirse en la ciudad más creativa. El año pasado, esta administradora de empresas nacida en Dinamarca estaba en Colombia, haciendo una certificación en innovación. La compañía que iba a certificar a Tina se llama Actitud Creativa, que es la creadora del evento llamado Ideas World Cup, una copa mundial de ideas en la que, si bien las ciudades compiten, todos los ciudadanos ganan. 

“Santa Cruz tiene que participar en esta competencia”, se dijo Tina. Ahí, en Colombia, conoció al organizador del evento Ideas World Cup en Bucaramanga, la ciudad que ganó el año pasado. Para ese momento, Tina Hansen estaba poseída  por la urgencia contagiosa que tienen los emprendedores y por la certeza de que sola no podría con el desafío. 

¿Cómo se hace?
¿Tiene que participar el municipio?¿O las empresas? Sí, le dijeron los españoles de Actitud Creativa. Pero en cada ciudad es diferente. A veces hay una alianza entre el municipio y una empresa privada, a veces no. Es una campaña privada. Desde octubre del año pasado hasta enero de este año se abrieron las inscripciones. Al principio, el proceso es simple. Basta abrir una web y recoger ideas. Se dice fácilmente, pero hay que convocar a la gente creativa. 

Tina buscó apoyo de Branko Zabala, experto en marketing que movió sus contactos hasta concretar una reunión en Unifranz. Asistieron 12 personas, pero no se desanimaron. Ahí estuvo el director de la Fundación Trabajo Empresa, René Salomón; se fueron sumando Ximena Montero, de Glow Comunicación Estratégica, Santiago Novillo, director ejecutivo de Aden Business School, Karem Infantas de Generaknow y otras más. Fernando Urquizo elaboró el sitio web para almacenar las ideas de acuerdo a los cinco temas que planteaba el concurso: energía, comunicación, educación, ciudades inteligentes y recursos naturales.

Intentaron que los participantes suban ideas a la web masivamente, pero algunos estudiantes no tenían megas y a veces la red se ponía lenta. René Salomón cuenta que con el apoyo de las universidades organizaron talleres en los que Unifranz, Universidad Católica Boliviana San Pablo, UPSA y otras más reunieron grupos numerosos que empezaron a entregar ideas. En ese momento, algunas jóvenes voluntarias empezaron a subir las ideas a www.ideasporsantacrz.org.

“Eso permitió que seamos la ciudad más creativa del planeta”. Reaccionaron instituciones como Amigarse, una fundación que desde hace nueve años impulsa el programa Luz de Luna, que ayuda a jóvenes a educarse, y que además promueve la sustentabilidad, la innovación y el pensamiento disruptivo . Entre las ideas que más llamaron la atención de Heiver Andrade, director de Amigarse, está la necesidad de reducir emisiones, mejorar la movilidad urbana y el consumo consciente del agua. Los jóvenes propusieron rescatar saberes como la cosecha de agua de lluvia, una política pública que promueva las energías alternativas y que todas las plazas y parques tengan sistemas de riego a partir de la cosecha de agua de lluvia e iluminados con sistemas de energías fotovoltaicas. 

Las propuestas 

René Salomón, Tina Hansen y Jimena Montero vieron que los jóvenes pidieron plantar árboles que serían cuidados por empresas y plantearon capacitar a los estudiantes en inteligencia emocional. Sugirieron tramitar documentos electrónicamente, como el pasaporte, el permiso de conducir y el carné de identidad. 

Ahora están agrupando las ideas para entregarlas a la gobernación y a la alcaldía. Esta suma de esfuerzos de expertos en varias áreas, latiendo al unísono, trabajando sin descanso, tuvo su premio. Santa Cruz logró reunir 14.382 ideas, lo que la convirtió este año en la ciudad más creativa del planeta. Y tiene a un equipo de ciudadanos dispuesto a defender el título el próximo año.