Blooming perdió en un insólito e irrepetible partido ante Palmaflor. Julio Gutiérrez, árbitro del encuentro, anunció 10 minutos de descuento, y terminaron jugándose 42 minutos y 11 segundos. ¿Por qué? ¡Repasá lo sucedido!

14 de marzo de 2023, 8:25 AM
14 de marzo de 2023, 8:25 AM

132 minutos y 11 segundos. Eso se jugó en Villa Tunari, en un partido que tuvo todas las polémicas incluidas. Desde el cambio de vestuario del local (en Sudamericana, Conmebol no permitió el uso de la camiseta blanca o de la azul, solo la amarilla original del club), los dos penales evitables que cometió Blooming, las dos debatibles expulsiones en contra del cruceño, la lluvia, y decisiones muy cuestionadas.

Blooming pasó del infierno de perderlo 2-0 al 81', a la algarabía de igualarlo al 90+24', y nuevamente se hundió tras el 3-2 final al 90+38'. No, no estás leyendo mal, efectivamente hubo 42 minutos adicionales en un partido de Liga, en donde se supone que solamente se juegan 90.

¿Qué pasó? ¿Qué incidencias ocurrieron para que se detenga tanto el juego?
El primer tiempo fue 'normal'. Además de algunos laterales, saques de meta, e infracciones, solamente estuvo la amarilla para Luis Rodríguez y el gol de Jonathan Cañete para el 1-0 parcial.

El segundo tiempo vio dos cambios en el entretiempo (no suman al tiempo añadido), y siete sustituciones durante el encuentro, también estuvieron las amarillas a Sebastián Reyes, Matías Pisano, Miyhel Ortíz, y Ronny Montero en Palmaflor; la amonestación de César Romero y las expulsiones de César Menacho y Miguel Becerra. Aún nada justifica los 42 minutos extra.

Al 85' Gastón Rodríguez descontó para Blooming y puso el 2-1. Para este entonces ya diluviaba en Villa Tunari. El campo de juego se llenó de charcos muy profundos, y ya no rodaba la pelota. Después del festejo, el línea anuló el tanto por fuera de juego, el VAR revisó y constataron que no había tal posición adelantada, pero consideraron una posible infracción contra el arquero.

Llamaron al árbitro principal, este vio la jugada, llamó al juez de línea para tener una opinión más, y después de no encontrarle el pelo a la leche, decidieron convalidar el gol. Fueron 13 minutos que tardaron solo en convalidar el gol.


Momento de la revisión entre el VAR, el juez principal, y el línea.

Posteriormente añadieron 10 minutos como tiempo de reposición, y luego sin anunciarlo cinco más, ya que hubieron algunas discusiones en el partido. Al 90+18, César Menacho peleó la pelota y golpeó al arquero de Palmaflor ganándose la amarilla, parecía justa la amonestación. El VAR nuevamente intervino y se perdieron otros 5 minutos aproximadamente para analizar la jugada, llamar al juez nuevamente y que este expulse al delantero.

No fue todo. Al 90+23 Blooming tocó el cielo con las manos y puso el 2-2 con Sinisterra. El partido ya era cualquier cosa. Los charcos gigantes en el campo eran visibles, la lluvia nunca se detuvo, la pelota no rodaba. Al 90+27 expulsaron de manera insólita a Miguel Becerra tras ganar una pelota dividida. El balón quedó frenado en un charco, y el de Blooming se tiró con todo a recuperar la pelota y la ganó. El césped mojado hizo ver todo más veloz y violento. El árbitro decidió expulsar a Becerra y el VAR no intervino en esta.

Al 90+38 llegó el colmo de colmos. Jonathan Cañete anotó el 3-2 y le dio la victoria al local, y el encuentro se cerró con pelotazos al cielo, a ver si así podían acercarse a los arcos rivales. Era injugable. Al 90+42 se cerró el partido y "finalizó el tercer tiempo" sentenció Blooming en sus redes sociales.

Si bien se desperdició mucho tiempo en las revisiones VAR y discusiones entre jugadores, nada justificaba los 42 minutos y 11 segundos extra que se jugaron en Villa Tunari.

¿Quiénes fueron los protagonistas de este insólito partido?
Julio Gutiérrez fue el juez principal, Edwin Paredes y Miguel Villanueva los asistentes (todos de La Paz), junto a Raquel Acero ofició de cuarta árbitra. Carlos García y Gustavo Vera fueron los encargados del VAR (los últimos tres de Cochabamba).