Un nuevo amparo constitucional puede generar el caos. Hoy se decide si Robert Blanco es el nuevo presidente de la FBF. Los clubes oficialistas paralizan el torneo

13 de mayo de 2021, 7:36 AM
13 de mayo de 2021, 7:36 AM

El fútbol boliviano vuelve atrás. Estalló una nueva crisis que tiene como primera consecuencia la paralización del campeonato de la División Profesional y que corre el riesgo de ser sancionada por FIFA y Conmebol.

La causa es el nuevo amparo constitucional interpuesto por el dirigente Robert Blanco contra el comité ejecutivo de la Federación Boliviana de Fútbol a raíz de la sucesión presidencial, tras el fallecimiento de César Salinas en julio de 2020.

Diez clubes y ocho asociaciones que apoyan al titular de la entidad matriz, Fernando Costa, reaccionaron de inmediato haciendo conocer su protesta a lo que consideran la intervención de la justicia ordinaria en el fútbol.

“Ante la inseguridad jurídica e intromisión de la justicia ordinaria en el ámbito deportivo futbolístico, nos vemos en la obligación de paralizar el fútbol a partir de la octava fecha del torneo de la División Profesional en adelante y de manera indefinida, así como los torneos de la División de Aficionados. Esta determinación se la realiza en total rechazo y repudio, anunciando que acudiremos a instancias deportivas superiores para que esta mala práctica sea condenada y eliminada del ámbito jurídico deportivo”, indica la resolución los clubes The Strongest, Always Ready, Aurora, Real Santa Cruz, Nacional Potosí, San José, Palmaflor, Real Potosí, Independiente Petrolero y Real Tomayapo.

Los clubes Bolívar, Blooming, Oriente Petrolero, Wilstermann, Guabirá y Royal Pari, más la Asociación de Fútbol de La Paz, están a favor de Robert Blanco.

La agremiación de futbolistas, Fabol, también respalda al exdirigente de Destroyers y también exvicepresidente de la FBF.

Los dirigentes de la Federación Boliviana de Fútbol fueron citados hoy a una audiencia virtual por vocales de la sala cuarta del Tribunal Departamental de Justicia.

Si el fallo es favorable a Robert Blanco, expulsado de por vida por el oficialismo de la FBF y suspendido treinta días por la Conmebol, puede generar un caos en el fútbol boliviano, porque quedarían anuladas un sinnúmero de determinaciones adoptadas en los últimos años.

Asimismo, si la Conmebol y la FIFA consideran que existe injerencia de la justicia ordinaria en la federación, el fútbol boliviano puede ser pasible a una dura sanción.