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3 de junio de 2019, 14:30 PM
3 de junio de 2019, 14:30 PM

Brasil es el rival de Bolivia para el debut en la Copa América 2019. El equipo auriverde llega al cotejo inaugural del 14 de junio con la obligación de ganar los tres puntos para ir empedrando el camino al título como exige su hinchada, aguijoneada tras las malas campañas en las recientes versiones de la Copa del Mundo. También pesa en contra la sequía de más de una década sin ganar la Copa América.

Roberto Aguirre - Periodista Deportivo

Justamente esa presión de la hinchada local puede ser uno de los pocos puntos débiles para sacar provecho. Ya pasó en el Mundial 2014. Si se le cortan los circuitos, se le copan los espacios, Brasil corre el riesgo de que sus figuras pierdan la línea. Y se sabe que en río revuelto, ganancia de pescadores.

El desafío de Bolivia es incomodar al anfitrión en el partido inaugural, una asignatura en la que tiene buenos antecedentes. El segundo rival que depara el fixture es Perú, el 18 de junio en el mítico Maracaná. Se trata de otro rival mundialista, que hizo una campaña más que aceptable en la Copa del Mundo de Rusia. Mantiene al entrenador Ricardo Gareca, que a la base del cuadro mundialista le ha ido agregando nuevos convocados. Perú ha recuperado esa esencia de juego con balón al piso, de ataque en triangulaciones, con orden en todas sus líneas

El tercer rival es Venezuela, para el 22 de junio en Belo Horizonte. Viene en permanente evolución, fruto de un trabajo organizado de su dirigencia, que comenzó a cosechar resultados con el actual entrenador Rafael Dudamel y la campaña de la Sub 17 en 2013.

Cuatro años después, el proceso tuvo frutos con el tercer puesto en el Mundial Sub 20. Diez jugadores de ese equipo forman parte del plantel que ahora cierra prácticas en EEUU, con tres amistosos.