El San Pablo y el colombiano James Rodríguez llegan a acuerdo para rescindir contrato
Elegido mejor jugador de la reciente Copa América, James, de 33 años, termina así un apagado pasaje por el equipo brasileño, al que llegó libre en julio de 2023 tras su paso por el Olympiakos griego.
El Sao Paulo y el colombiano James Rodríguez llegaron a un acuerdo para rescindir el contrato que les unía hasta julio de 2025, según confirmaron fuentes del club brasileño a la AFP este domingo.
"La rescisión se firmó hace unos días de forma privada entre ambas partes", afirmó una fuente del departamento de prensa del Sao Paulo.
Elegido mejor jugador de la reciente Copa América, James, de 33 años, termina así un apagado pasaje por el equipo brasileño, al que llegó libre en julio de 2023 tras su paso por el Olympiakos griego.
Pese a ser presentado con bombos y platillos, el rendimiento del exjugador del Oporto, AS Mónaco, Real Madrid o Bayern Munich, entre otros equipos, dejó mucho que desear en Brasil, actuando en apenas 22 partidos, con dos goles marcados.
Con poco protagonismo en el equipo, James falló el único lanzamiento del Sao Paulo en la tanda de penaltis de los cuartos de final de la Copa Sudamericana de 2023, en casa contra la LDU de Quito, error que le costó la eliminación al tricolor paulista.
Posteriormente, no fue utilizado por el técnico Dorival Junior en ninguno de los dos partidos de la final de la Copa de Brasil contra el Flamengo, que acabó venciendo el Sao Paulo, algo que molestó visiblemente al jugador.
Este año, James tampoco tuvo protagonismo en el equipo, primero con Thiago Carpini en el banquillo y luego con el argentino Luis Zubeldía.
En febrero, el mediapunta pidió al club rescindir el contrato, aunque sin ofertas, hizo marcha atrás y optó por permanecer en el club brasileño.
Pese a la falta de minutos en su club, James brilló en sus convocatorias con la selección colombiana, a la que llevó a la final de la Copa América, perdida contra Argentina.
Según la prensa brasileña, James renunció al 75% de la prima de fichaje y bonos que había firmado y que el Sao Paulo le debía para obtener la rescisión y quedar libre.
Aunque el jugador todavía no tiene nuevo destino, su deseo es volver a jugar en Europa, según medios locales.