El equipo carioca derrotó este miércoles a Barcelona de Ecuador por 2-0. La segunda semifinal será el próximo miércoles en Guayaquil.

22 de septiembre de 2021, 23:34 PM
22 de septiembre de 2021, 23:34 PM

Un doblete de Bruno Henrique contra el ecuatoriano Barcelona este miércoles en el Maracaná, en la semifinal de ida de la Copa Libertadores, ilusiona a Flamengo con disputar el título del principal torneo de clubes de América.

El atacante, de 30 años, llegó a cuatro goles en la edición 2021 de la competición al coronar dos jugadas (22, 38) en las que el goleador Gabriel Barbosa 'Gabigol' fue vital para desarmar la defensa de los guayaquileños en el templo carioca, adonde ingresaron 35.000 personas, casi la mitad de su capacidad.

El bicampeón brasileño, dirigido por Renato Portaluppi, dio un paso grande para buscar su tercera Libertadores, tras las alzadas en 1981 y 2019, ante un equipo que lo enfrentó sin complejos pese a jugar todo el segundo tiempo con un hombre menos por la expulsión del mediocampista Nixon Molina (45+2).

Ambos equipos se reencontrarán el próximo miércoles en Guayaquil. El vencedor de la serie se batirá en la final con el ganador de la llave brasileña entre Palmeiras y Atlético Mineiro, que empataron 0-0 en la ida el martes en Sao Paulo.

"Conseguimos un buen resultado, sabemos que jugar allá es muy difícil. Vamos a ir pensando en jugar, en mostrar lo mejor de nosotros, como lo hicimos hoy", dijo Bruno Henrique.

- Juego vertiginoso -

Fue, en buena medida, una pelea a campo abierto. ¿Preocuparse por defender? No, lo de Flamengo y Barcelona fue puro vértigo, ganas de herir al rival sin pensar en el minuto siguiente. La diferencia estuvo en quién hizo daño y quién no.

En el primer cuarto de hora los 'canarios' parecieron halcones al exigir al máximo a Diego Alves. El exinternacional brasileño tuvo una notable doble atajada contra el uruguayo Gonzalo Mastriani y Molina (7), y después despejó un remate cruzado del argentino Emmanuel Martínez (11).

El inicio vertiginoso del Barcelona del argentino Fabián Bustos probó a la zaga del 'Fla', en la que debutó el experimentado David Luiz, pero la falta de cabeza fría en el sector final del campo les jugó en su contra.

Su '10', Damián Díaz, no cambió de velocidades y ambos equipos jugaron en quinta marcha, una opción que el bicampeón brasileño asumió por la baja de su creativo, Giorgian de Arrascaeta, lesionado.

Sin el uruguayo, el goleador de la Copa, Gabigol, con diez tantos, y Everton Ribeiro manejaron los hilos del popular equipo carioca. Sacudidos del inicio sobrecogedor de Barcelona, impusieron, con goles, el peso de su poderosa nómina.

- Dupla letal -

Gabigol centró desde derecha con rumbo a Bruno Henrique, con quien ha formado una alianza entrañable. El extremo cabeceó y venció al argentino Javier Burrai, quien antes había desviado un tiro complicado de Ribeiro.

Animados por la ventaja, los anfitriones se fueron encima usando la fórmula probada por sus rivales tiempo antes, pero con contundencia. 

Bruno Henrique y el belga-brasileño Andreas Pereira estrellaron disparos en los palos (34, 37). Y una alianza de Gabigol y Vitinho se selló cuando este último dejó al goleador del partido debajo del arco para que sentenciara el cotejo.

Con vocación desde tiempos del portugués Jorge Jesús, Flamengo no claudicó en sus intentos de liquidar la serie, especialmente después de la expulsión de Molina por una entrada fuerte sobre Bruno Henrique.

Aun con diez jugadores, los visitantes, intrusos en unas semifinales dominadas por los herederos de Pelé, perturbaron a Alves, quien sacó a relucir los galones que lo tuvieron por años en Europa y la 'Seleçao'.

"Debemos hacer nuestro partido en casa, todavía estamos con vida", afirmó el defensor Fernando León.

Tranquilos por la noche redonda de su portero, los rojinegros intentaron ampliar la ventaja pero fueron incapaces de provocar más opciones para sus atacantes. Su noche se opacó, en el 89, por la expulsión del zaguero Léo Pereira por un codazo sobre León.

Aunque no tuvo complejos ni se intimidó en el Maracaná, Barcelona pagó caro su falta de definición y dejó servido el pase del 'Mengao' a la final de la Libertadores, que, al parecer, como la de 2020, será brasileña.