Este miércoles, a partir de las 15:15 se define el título de la Copa de Francia. Ambos equipos llegan con sed de gloria

18 de mayo de 2021, 9:25 AM
18 de mayo de 2021, 9:25 AM

El día de la reapertura de las terrazas de los bares en el país, el miércoles (15:15), la final de la Copa de Francia opone a dos clubes con sed de gloria: el París SG y el Mónaco, que pueden todavía lograr el doblete, al tener opciones de título de la Ligue 1, como perder todo en cuatro días.

El azar del calendario ha hecho coincidir este partido con el inicio del final de las restricciones sanitarias en Francia.

Tras un invierno dominado por la pandemia de Covid-19, los franceses podrán de nuevo tomar una copa en el bar o ir al cine... pero no reunirse para ver el PSG-Mónaco, debido al toque de queda a las 21:00 locales (15:00 HB).

Curiosamente, el lugar del partido, el Stade de France, es un centro de vacunación desde el 7 de abril.

Parisinos y monegascos se encuentran por tanto en el centro de una actualidad desbordante y un fin de temporada palpitante, para un partido tan esperado como temido por ambos equipos, que tienen mucho que perder.

Sobre todo París, que olvidó sus viejas costumbres. Sin contar el honorífico Trofeo de Campeones (Supercopa de Francia) que ganó en enero contra Marsella (2-1), el PSG corre el riesgo de terminar la temporada sin título mayor, por primera vez desde 2012.

- Incertidumbre sobre Neymar -

Eliminado por Manchester City en semifinales de la Liga de Campeones, el club de la capital está cerca del fiasco en campeonato, ya que el líder Lille le precede en un punto antes de la última jornada del domingo.

"Hay que creer y vamos a hacerlo", lanzó el entrenador Mauricio Pochettino, cuyo sueño de ganar la L1 está condicionado a un paso en falso de Lille el domingo en Angers. La Copa de Francia parece el camino más simple para lograr un trofeo.

Pero el Mónaco es el único equipo de Ligue 1 en haber derrotado dos veces al PSG esta temporada, después de ganar el 21 de febrero en el Parque de los Peincipes (0-2).

Ese día, Neymar, lesionado en un aductor, no había jugado, y su alternativa como número 10, el italiano Marco Verratti, solo entró en el minuto 55, no en su mejor versión debido a dolores musculares.

Este miércoles, ninguna de estas dos estrellas estará en el terreno. El delantero brasileño está suspendido, mientras que el centrocampista italiano está lesionado en una rodilla, dos ausencias que crean un vacío en un equipo dependiente de su sentido de la creación.

Pero por Neymar y por Presnel Kimpembe, también suspendido, el club se plantea pedir una conciliación ante el CNOSF (Comité Olímpico Francés) que podría permitir levantar temporalmente su sanción y que puedan jugar el miércoles.

- "Fuerza de carácter" -

Si Neymar no jugara, Pochettino puede todavía contar con su goleador Kylian Mbappé, autor de un doblete en cada uno de sus tres partidos de Copa que comenzó esta temporada.

La eficacia de 'Kyky' será una de las claves del partido, como la de sus rivales Wissam Ben Yedder y Kevin Volland, un dúo que ha llevado al ASM mucho más arriba de su novena plaza del año pasado.

A tres puntos del líder Lille, el club del Principiado puede todavía esperar ser campeón de Francia, pero deberá tener un guion casi improbable. Igual que para París, la Copa es el medio más directo para ganar un título.

"No se nos veía en final, ni siquiera entre los tres primeros en Ligue 1. ¡Y aquí estamos! Abordamos esta final con muchas ganas, con mucha fuerza de carácter", lanzó Ben Yedder.

"Creo en la victoria enormemente", abundó el entrenador Niko Kovac, que con Eintracht de Fráncfort, en 2018, en la final de la Copa de Alemania, había dado la sorpresa contra el Bayern (3-1).