El golero de la academia paceña fue una muralla bajo los tres palos. Fue el mejor jugador de su equipo, evitando la caída de su portería en más de una ocasión ante los ataques de Oriente.

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8 de marzo de 2018, 23:49 PM
8 de marzo de 2018, 23:49 PM

Romel Quiñónez volvió a demostrar seguridad bajo los palos. El arquero de Bolívar terminó como la figura en el empate de su equipo ante Oriente Petrolero, evitando en más de una ocasión la caída de su portería con tapadas notables. El ‘1’ muestra una mejoría notable en su rendimiento desde que volvió a la academia.

“Fue un partido con mucho rose porque se trata de dos equipos que siempre están peleando los primeros lugares. En lo personal estoy mejorando mi nivel gracias al apoyo de los compañeros”, manifestó el portero cruceño tras el final del compromiso en el Tahuichi.

Quiñónez ahogó el grito de los orientistas en cuatro ocasiones, tres frente al venezolano José Alí Meza y una sobre el final del partido, cuando el golero se estiró para tapar un tiro libre ejecutado por Alexis Ribera. El golero se ganó los aplausos de los pocos seguidores celestes que acompañaron a Bolívar en el Tahuichi.

Quiñónez salvó sobre el final la caída de su portería. Foto: Jorge Uechi