El volante tarijeño y el lateral izquierdo camireño tienen 19 años. El primero es llamado por segunda vez por Villegas, mientras que al defensor lo convoca por tercera vez

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21 de marzo de 2019, 6:35 AM
21 de marzo de 2019, 6:35 AM

Los dos tienen una historia totalmente distinta, pero ambos tuvieron un destino común: la selección boliviana. Sí, estamos hablando del volante tarijeño Ramiro Vaca Ponce y del lateral izquierdo camireño Roberto Fernández Toro, ambos tienen 19 años y son los más jóvenes de la lista de 23 que enfrentarán a Corea del Sur (22/3) y a Japón (26/3).

Vaca fue llamado por Villegas desde el segundo microciclo del año, lo puso de titular en el empate ante Nicaragua (2-2) e incluso marcó un gol, el primero de la Verde. En la primera etapa de trabajo, los jugadores de su club The Strongest no fueron tomados en cuenta porque estaban en competencia internacional.

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El joven volante se formó en Unión Central de Tarija, tenía cuatro años e iba a la sub-6. Después pasó a Tenis Soccer y posteriormente trabajó en Quebracho de Villa Montes (club que fundó su padre) hasta que fue fichado por el Tigre. Hace poco fue uno de los más destacados en el Sudamericano Chile 2019 Sub-20, marcó el único tanto de la selección en ese torneo.

Con una promesa

Roberto fue tomado en cuenta por Villegas desde el trabajo que se realizó en Santa Cruz. El defensor es titular en Blooming desde la llegada de Erwin Sánchez y poco a poco le fue quitando el lugar a José Sagredo que terminó recalando en el Tigre. Unos días atrás marcó un gol 'a lo Messi' ante el mismo equipo atigrado y dejó asombrados por propios y extraños en el Tahuichi Aguilera.

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Sus inicios fueron en la escuela Fútbol Club Camiri, luego pasó por el equipo Ismael Montes. Hace tres años que fue seleccionado en la academia en un curso de verano, fue prestado a Quebracho de Tarija para volver ganarse un espacio en el once de 'Platiní'. Cuando llegó a la capital cruceña le prometió a su padre encontrar un conjunto en un año y lo cumplió en menos tiempo, caso contrario tenía que retornar a su natal Camiri.