Andrés Felipe Martínez encarnó a Malcom, el mayordomo de las Elizondo que atormentaba a los hermanos Reyes

20 de diciembre de 2022, 11:42 AM
20 de diciembre de 2022, 11:42 AM

Hace 19 años, el actor colombiano Andrés Felipe Martínez encarnó a Malcom en la telenovela Pasión de Gavilanes, uno de los antagonistas más recordados de la historia de las familias Elizondo y Reyes.

Pues, a pesar de haber participado junto a Danna García, Mario Cimarro, Paola Rey, Juan Alfonso Baptista, Natasha Klauss y Michel Brown en una de las telenovelas colombianas más exitosas y populares de América Latina, además de otros proyectos exitosos en su país, un día le tocó dejar su profesión, vender todos sus bienes y migrar a Estados Unidos para no "morir de hambre". 

Hace unos días, en entrevista con La Red, programa colombiano de Caracol Televisión, reveló la dura situación que atraviesa a sus 60 años, comiendo poco y durmiendo donde toque para ahorrar. Sin embargo, considera que esa situación es mejor que la que pasaría en su tierra.


"Decidí tomar un riesgo aquí y darles la oportunidad a mis hijos de tener un futuro. Yo vine acá primero a radicarme legalmente. Ya tengo ‘social security’. Permiso de trabajo. Conseguí una abogada para buscar la visa de talento, dijo, además de contar que primero trabajó limpiando casas y hoy lo hace en una empresa de envíos.

“Aquí se sufre mucho. Las condiciones son muy difíciles. Casi no como. Vivo en una casa compartida con otras personas. Pero me da para enviarle plata a mis hijos y ahorrar", indicó.

El ahorro es tan extremo que a veces, contó, prefiere no regresar a su casa y quedarse en un sitio específico "porque cuesta tiempo y dólares”, aunque eso implique dormir en el suelo.

También confesó que la soledad lo atormenta. "Cuando hablo con mis hijos, siento la soledad más grande. Eso me parte el corazón, me hace sentir que las fuerzas me faltan y me provoca salir corriendo a abrazarlos. Pero sé que si hago eso mis hijos se van a quedar sin futuro y al cabo de dos meses nos vamos a morir de hambre. Es un sacrificio”, relató.

"Yo esto lo estoy haciendo por mis hijos, seguramente si no tuviera a mis hijos estaría en Colombia… Aquí se sufre mucho, las condiciones son muy difíciles, pero hay una gran diferencia: mientras que en mi país haciendo un trabajo como el que yo hacía el año pasado, no me daba para comer, aquí sí", agregó.