Se contagió hace dos meses, estuvo un par de semanas aislada y en tratamiento. Sufrió, tuvo mucho miedo y entró en depresión. Ahora está curada y en el concurso

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7 de septiembre de 2020, 20:04 PM
7 de septiembre de 2020, 20:04 PM

"Pocos valoran lo que tienen hasta que lo pierden", dice con mucha seguridad María Belén Karageorge Rousseau, la candidata a Miss Santa Cruz 2020 que se infectó de Covid-19 y lo venció. Afirma que lo más preciado que puede tener un ser humano es su salud y que hace dos meses ella atravesó momentos dramáticos, cuando su vida estuvo en peligro a causa del coronavirus.

Cuenta que su vida era completamente normal, vive con sus padres y hermanos, estudia y se postuló al concurso Miss Santa Cruz, donde fue admitida luego de un casting. Empezó a prepararse con clases de pasarela, arreglo personal y cultura general en Promociones Gloria. También cambió sus hábitos alimenticios, siguiendo una dieta sana y balanceada, además de ejercitarse todos los días.

Un fin de semana, hace un poco más de dos meses, Belén fue de paseo a la quinta de un familiar, en el norte cruceño. Allá comentaron que unos vecinos se habían infectado de coronavirus, pero ella no le dio importancia. Creía que al ser joven, al estar bien alimentada y fuerte no tenía posibilidades de contagiarse, además seguía las normas de bioseguridad.

A los cuatro días, un primo, que estuvo en ese mismo paseo, le comunicó que había dado positivo en un test de Covid-19 y que estaba seguro que se contagió en esa quinta. Al día siguiente, a ella le dio fiebre, luego sintió dolores en el cuerpo y después perdió el gusto y el olfato.

Belén y su hermana Mariana (18) fueron a un laboratorio clínico y se hicieron la prueba para detectar el coronavirus. Dio positivo, sí estaba infectada. Ella que se creía inmune por ser joven y fuerte, era portadora del virus.

Cuenta Belén que muchos pensamientos negativos pasaron por su cabeza. Temblaba mientras regresaba a su casa en compañía de su hermana. Le informaron a sus padres y de inmediato fueron al médico, que les dio un tratamiento para combatir el virus.

Lo primero fue aislamiento, que lo pudo hacer en su casa, junto a su hermana. Luego empezó a tomar los remedios que le recetaron, que eran azitromicina y tipyrec, principalmente. Luego hacía vahos de eucalipto y manzanilla dos veces al día. Seguía comiendo sano, sobre todo frutas y verduras, y tomaba bebidas calientes de hierbas medicinales.



El médico le explicó que debido a que su sistema inmune era fuerte, el virus iba a ser derrotado en menos tiempo, y que no tendría secuelas.

Entró en pánico

Estuvo encerrada en su dormitorio durante dos semanas, tiempo que duró su tratamiento. En su soledad Belén reflexionó sobre la vida y las posibilidades de enfrentarse a la muerte, a pesar de que le decían que su enfermedad estaba controlada.

Lloraba y se arrepentía de haber ido a ese paseo. Se cuestionaba por no haber tenido más cuidado con las cosas y superficies que tocaba, y hasta dónde se sentó en aquella visita. La aterrorizaba la idea de contagiar a sus padres, pero tuvo todo el cuidado necesario para que no suceda, y no pasó.

Entró en depresión. No quería comer ni levantarse de su cama. Se negaba a seguir el tratamiento médico y creía que le mentían, que estaba grave. No contestaba las llamadas a su celular ni los mensajes de Whatsapp. Dice que fueron días terribles, de miedo y de mucha tristeza.

A pesar de que ya estaba admitida en el Miss Santa Cruz 2020 pensó en retirarse del concurso. No quería saber de nada, menos de participar en un certamen de belleza. En ese momento lo principal era su salud y su vida, lo demás era secundario.

El médico le levantó la moral. Le explicó bien el proceso de su infección, le dijo que sí, que era grave, pero que si seguía su tratamiento, se curaría y que su salud volvería a la normalidad. Apoyada también por su hermana Mariana y por sus padres, empezó a salir de ese túnel de oscuridad y dice que vio una luz de esperanza, que era la vida que le esperaba.

Se curó

A los 15 días de su contagio y luego de haber retomado su tratamiento médico, Belén y su hermana se sometieron a otra prueba de Covid-19. Cuando le entregaron el resultado temblaba y dijo "que sea lo que Dios quiera". Salió negativo, ya no tenía el virus y estaba curada. Respiró aliviada y lloró de alegría, volvió a su casa y le dio la nueva buena a sus padres.



A la semana siguiente se hizo otro test y el resultado dio nuevamente negativo. Fue allí cuando de verdad se quedó tranquila y su vida volvió a la normalidad. Dice que fueron los peores días de su vida, que nunca había sufrido tanto.

Manifiesta que está muy agradecida con Dios, pues él le dio otra oportunidad de vida. También está en deuda con los médicos y personal de salud que la atendieron, dice que son verdaderos ángeles.

Antes de volver a las actividades del concurso Miss Santa Cruz se volvió a realizar otro estudio, y por tercera vez consecutiva le dio negativo al Covid-19.

A los grandes y a los chicos les expresa que no crean que tienen la vida asegurada, que lo más importante que se tiene es la salud y la familia. 

¿Quién es ella?

Belén Karageorge Rousseau es la representante de Fusindo en el Miss Santa Cruz 2020. Tiene 23 años, mide 1,68 m y cursa el cuarto año de la carrera de Ingeniería Civil en la Uagrm. Desde sus 18 años se ha desempeñado como modelo y como impulsadora comercial.

Cuando recién se declaró la cuarentena trabajó en campañas de solidaridad recolectando alimentos no perecederos, remedios y artículos de uso médico, que se llevaron a Baures, Beni, la tierra de sus padres.

Dice que le gustaría ser Miss Santa Cruz para utilizar la corona a favor de los más necesitados, de los niños y de las mujeres. Sabe que la voz de una reina de belleza tiene alcance, por ello desea convertirse en imagen de campañas de ayuda social.