Cómo ahorrar en época de pandemia
Un experto da consejos para priorizar los gastos y qué hacer con las deudas, entre otros temas
Como es bien sabido, la crisis sanitaria también generó inestabilidad social y económica; muchos negocios se han paralizado y las empresas que no han dejado de trabajar o han reabierto lo hacen con menor capacidad e ingresos. Por supuesto, esto afecta a empresarios y directamente a sus empleados.
El economista cruceño Carlos Hugo Barbery comparte algunos consejos básicos y prácticos para ahorrar de forma inteligente.
* Lo primero que hay que cubrir son las necesidades básicas de subsistencia, después los gastos generales y luego ahorrar algo para contingencias. Lo último en lo que se debe pensar son los pequeños gustos.
* Llevar el control de los ingresos y de los gastos. Hoy en día existe una gran cantidad de aplicaciones de descarga gratuita de administración de finanzas.
* Poner un tope de gasto a las tarjetas de crédito y de débito.
* Para las familias que han sufrido reducciones de ingresos (por no tener comisiones sobre ventas, por ejemplo), se recomienda que cubran los gastos fijos con el ingreso fijo y sacrifiquen algunas necesidades que se pagaban con el ingreso variable, como renovar ropa, compra de comida fuera de casa, etc.
* Los ahorros de combustible o diversión, por ejemplo, deben utilizarse de la mejor manera posible, como aumentar la velocidad del Internet para trabajar desde casa.
* Las personas que tengan deudas, deben analizar el flujo de dinero con el que cuentan. Por ejemplo, si renovaron el auto por un mejor ingreso variable y parte con el banco, pues al no haber la fuente de pago, lo mejor es vender el auto y cancelar la deuda. Pero si aún tiene flujo, pero en un panorama muy incierto, puede evaluar negociar la deuda llevándola a mayor plazo con menor cuota.
* El ahorro tiene como fin o invertir o prever consumo futuro, si no hay un horizonte de inversión, guardarlo en el banco para cuando llegue el consumo futuro.
* El ahorro es muy importante, aunque sean Bs 50 al mes, no es una cuestión de riqueza, sino de que se convierta en un hábito para la vida.