Hay un interés de varios gestores culturales y artistas por cuidar sus cuadros. Un colectivo hace ges-tiones para restaurar tres cuadros de Pedraza que están en el aeropuerto. Sus hijos buscan restaurar un mural del Comité Pro Santa Cruz

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6 de febrero de 2022, 5:00 AM
6 de febrero de 2022, 5:00 AM

La obra de Herminio Pedraza dejó una huella imborrable en el arte boliviano. Sus cuadros, la mayoría de ellos con imágenes costumbristas, pintados con un estilo único, se encuentran en diferentes museos, centros culturales e instituciones de Santa Cruz y de otros departamentos del país. El reconocimiento hacia la figura de Pedraza y hacia su trabajo es innegable, eso quedó de manifiesto hace un par de semanas, cuando un grupo de artistas, curadores y gestores culturales se movilizó para salvar del deterioro tres pinturas suyas que estaban ubicadas en distintas salas del aeropuerto Viru Viru. En esa ocasión, la artista Raquel Schwartz, quien dio la voz de alerta sobre lo descuidada que estaban estas piezas, dijo: “No hay muchas obras del artista disponibles para el mercado y por esa razón creo importante poder restaurar estas”.

A partir de este incidente, un grupo de personas preocupadas por el destino de los cuadros de Pedraza, tuvo varias reuniones para ver cómo podían ayudar. Jorge Luna, licenciado en filosofía e investigador en Artes, es uno de los involucrados en este trabajo y quien se reunió con el gerente regional de Sabsa, Joaquín Hurtado, para hacerle conocer estas inquietudes y ahora están elaborando una carta en la cual le harán una propuesta de trabajo para restaurar las piezas pictóricas.

Luna también informó que, gracias a estas gestiones, las personas interesadas en esta solicitud decidieron crear un colectivo denominado Gestores por el patrimonio, que está conformado, además de su persona y de Raquel Schwartz, por Marcelo Araúz, María Schneider y Marcela Rivera, cuyo interés principal por el momento es el de preservar la obra de Herminio Pedraza, y después verán las posibilidades de hacer lo mismo con la de otros artistas de Santa Cruz.

Por ahora, uno de los nombres propuestos para la restauración de las obras es Víctor Hugo Terceros, quien realizó una valoración del trabajo por hacer mediante archivos fotográficos, ya que él reside fuera de Bolivia. En un artículo publicado por Luna, se señaló que las conclusiones de Terceros indicaban que una de las obras del aeropuerto, titulada La despedida, sufre de craquelamiento, que respondería al resecamiento ambiental; además señala pérdidas de pigmentación y tono original en diversas zonas; hace notar también “destensado de la tela debido del bastidor de soporte”, esto en el caso del cuadro donde se observan el carretón de bueyes.

Los tres cuadros del aeropuerto Viru Viru fueron donados por el propio Pedraza hace más de 30 años.

Interés de la familia

Cristina Pedraza es una de las hijas de Herminio Pedraza, reside en Italia. Desde allá comentó que está interesada en la restauración de los tres cuadros, y que sabe que Victor Hugo Terceros es quien posiblemente llegue a hacer la operación. Se ha estado comunicando con Marcelo Araúz para ver cómo van las gestiones. Cristina, quien también sabe de restauración, indicó que vendrá a Bolivia en marzo y le gustaría observar lo que se hace en este aspecto.

Pero Cristina también mencionó que algo que les interesa mucho concretar es la restauración del mural situado en el Comité Pro Santa Cruz, titulado Rompiendo cadenas y que fue realizado y entregado por Herminio Pedraza a comienzos de la década de los 80 del siglo pasado. “Quiero ver si ese trabajo lo puede hacer mi hermano David, quien realizó el mural como ayudante de mi padre y actualmente sigue trabajando como restaurador en Gras, Austria”, explicó Cristina.

Rompiendo cadenas es una pieza en acrílico sobre cemento de 11 x 4.60 metros, se encuentra en el salón Colonial del Comité y la firma dice “Herminio Pedraza. Ayudantes David Pedraza Willam Pedraza”.

Es difícil saber cuántas son las obras pictóricas que en total produjo Herminio Pedraza, Cristina señala que son más de 500, pero que pueden ser miles si se cuentan sus diseños, dibujos, esculturas y otros. Sus piezas se pueden encontrar en oficinas bancarias y otras instituciones públicas y privadas. Desde la Alcaldía cruceña, Benicia Chávez, jefa del Departamento de Patrimonio, dijo que en la colección municipal del Museo de Arte Contemporáneo tienen siete obras de Herminio. “En la sala permanente de la Casa de la Cultura están en exposición seis cuadros: Arando, La tambora, La pascana, La fuga,  El abrazo del bibosi y Costurando. Y en el edificio central de la alcaldía, en la sala de reuniones de protocolo, está la obra Carretón con zapallos”, explicó Chávez, quien agregó que las pinturas no tienen daño que requiera restauración, pero si se hará un mantenimiento a un par de bastidores de madera que por la humedad se deben cambiar.

Importancia fundamental

El artista y curador Eduardo Ribera ‘Bluebox’ indica que la obra de Herminio Pedraza se convierte en algo singular porque mientras que en los años 50 había una gran producción sobre lo que era el indigenismo y se enfocaban mucho en la cultura andina, en las características melancólicas del territorio y de su gente, Pedraza presenta algo completamente distinto. “La obra de Herminio es una obra alegre, colorida, llena de esperanzas y de vida, en ella  no se expresa ninguna melancolía, sino más bien esta vida apacible de quienes habitaban la selva o los pueblos de antaño”, indica Ribera, quien agrega que sus pinturas no son una imagen de la contemporaneidad que vivió él, sino más bien lo que él veía en los pueblo, no así en la ciudad de Santa Cruz.

A Herminio Pedraza se lo sitúa en la corriente artística del fauvismo y para Ribera, su obra va más allá de ese término. “A diferencia de la mayoría de los fauvistas –porque fauvista quiere decir ‘salvaje’- su pintura es totalmente controlada, porque le da una importancia al dibujo muy clara, porque él, casi coo un arquitecto, genera axonometrías. Es muy importante el punto de fuga en un cuadro de Pedraza, siempre hay una profundidad, no son cuadros planos, sino muy renacentistas”.

Cuando Ribera fue encargado del Museo de Arte Contemporáneo cruceño, en 2015, inició una campaña para reunir la mayor cantidad de cuadros de Herminio Pedraza para una exposición, y antes, en 2010, organizó una destacada exposición en la Centro Simón I. Patiño en su homenaje. “Deberíamos estar muy orgullosos de haber tenido a este artista. Es el artista más grande de Santa Cruz y no ha recibido la atención que se merece”,  resalta Ribera.

La obra de Herminio Pedraza sigue dando que hablar y cada vez es rescatada por nuevas voces.

El artista, que falleció en 2006 dejó un legado impresionante que es objeto de admiración y de estudio hasta ahora.