La reina prefiere mantenerse en un segundo plano repitiendo estilismos. Apareció con un vestido ‘print floral’ que ya había utilizado antes

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16 de octubre de 2020, 14:15 PM
16 de octubre de 2020, 14:15 PM

Este fin de semana tiene lugar una de esas citas especialmente señaladas en el calendario para la Familia Real española. Se trata de la entrega de los emblemáticos Premios Princesa de Asturias. Los reyes y sus hijas llegaron a Oviedo para protagonizar el primero de los eventos como parte de este marco y realizaron una visita guiada por las instalaciones de la Fábrica de Armas de la Vega, acto en el que tanto la reina Letizia como la princesa Leonor y la infanta Sofía apostaron por conjuntos que aunaban elegancia y comodidad. 

El año pasado, la reina impactó en esta cita al volver a apostar 15 años después por Pertegaz, la firma encargada de confeccionar su vestido de novia, mientras que en esta ocasión optó por una elección algo más discreta, pero no por ello menos acertada

Apuesta segura

Doña Letizia usó uno de los vestidos más comentados que estrenó en 2019, un sofisticado modelo que lució en varias ocasiones en los últimos meses. Se trata de una pieza de Carolina Herrera, una de sus firmas preferidas para actos señalados como el de este fin de semana, que cuenta con la favorecedora silueta ‘corola’ -una de las más características de su armario- que tanto potencia la figura femenina, con cuello 'a la caja', manga francesa, cuerpo entallado, corte a la cintura y falda en línea ‘A’ media pierna. 

Un look viral

A pesar de que este tipo de modelos son recurrentes en su vestidor y tampoco es la primera vez que se decanta por el  ‘print floral’, este estreno resultó impactante y logró generar numerosos comentarios por varios motivos. El primero, por la ocasión en la que se lo vio por primera vez, la inauguración de una exposición en Londres con el príncipe Carlos de Inglaterra. El segundo, porque siempre que lució estampados botánicos lo hizo con tejidos más románticos e hiperfemeninos, de texturas vaporosas y tonalidades pastel, mientras que esta prenda muestra su faceta más ‘arty’, con un tejido de grandes flores teñidas de tonos lilas, verdes y corales sobre un fondo en azul petróleo.

Nuevos accesorios

Para darle un nuevo aire a este diseño que ya se lo vio en cuatro ocasiones, la reina sustituye los tonos azules con sus infaltables stilettos verdosos que también casan a la perfección con él. En cuanto a las joyas, recupera sus pendientes de oro blanco y diamantes con forma de mariposa, que se pueden apreciar gracias a la coleta que despeja su rostro, peinado que parece haberse convertido en uno de sus preferidos en este 2020. Como es habitual, remata con el anillo dorado de Karen Hallam que le regalaron sus hijas y que no se quita desde entonces.