La obra fue escrita por una periodista a la que la cantante le contó todo lo que vivió, desde racismo por ser hija de un afroamericano, hasta violencia familiar

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8 de diciembre de 2020, 9:55 AM
8 de diciembre de 2020, 9:55 AM

La glamurosa vida que mostraban los diarios y revistas de la farándula de la cantante Mariah Carey (51), solo era apariencia, los excesos, el racismo, los abusos familiares y los desamores eran la realidad. Todo ello lo cuenta en el libro The meaning of Mariah Carey, escrito por la periodista Michaela Angela Davis.

La artista y la redactora, que fue editora de la revista Essence se conocieron en Miami hace algunos años. Se hicieron amigas y llegaron a un acuerdo para escribir sus memorias, como una especie de catarsis que le servía para soltar las penas que tanto la atormentaban.

Durante varios días charlaron largo y tendido. Mariah se fue soltando y cada vez aparecían en su mente más recuerdos que enriquecían la charla. Habló de los años de su niñez, cuando fue testigo de cómo su padre, un afroamericano, le pegaba a su madre. Luego su progenitor los abandonó y, aunque fue traumático, quedaron aliviados por un corto tiempo.

La paz no llegó a su familia, su hermano mayor varias veces golpeó a su madre y una vez tuvieron que llamar a la Policía para que las defendiera, porque temían por su vida. 



En otra ocasión, la hermana de Mariah la drogó con valium, cuando solo tenía 12 años. También le puso cocaína en la nariz, para que la inhale. Esa era el ambiente en el que vivía cuando era niña.

Una vez en el colegio su profesora le pidió que dibujara a su familia. Ella lo llevó a cabo y cuando le tocó pintar a su padre lo hizo con un tono marrón oscuro. La docente le dijo que se había equivocado, que él no podía tener ese color de piel, ella le dijo que sí, que su progenitor era afroamericano.

En otra ocasión, unas compañeras del colegio la agredieron físicamente en el patio y le gritaban "negra, negra". Eso la marcó para siempre, pues no quería ser afrodescendiente, y es que ello le traía problemas en una sociedad racista.

Pero no todo era malo en su vida. Se desahogaba cantando, que era su gran pasión. En la escuela le decían el ruiseñor por su hermosa voz y participaba en todos los actos cívicos. Hasta que su madre se dio cuenta de que Mariah era su mina de oro, que podría explotar su talento para hacerse rica.

Y así fue, la joven fue llevada a un estudio musical donde le hicieron varias pruebas de interpretación. Todos quedaron asombrados por la calidad vocal que poseía, su voz era excepcional, pocos artistas tenían algo parecido y no dudaron en hacerla firmar un contrato y empezar a producir un disco.

La empresa discográfica era Columbia, de la que Tommy Mottola era su presidente, que además se convirtió en su guía, amigo y con quien después se casó.



Quienes más se alegraban de que le vaya bien profesionalmente eran sus familiares, pues veían que tendrían grandes ingresos económicos y que así arreglarían sus vidas. Mariah firmó un contrato de 50 millones de dólares por la grabación de varios discos que empezaron a producirse inmediatamente.

El éxito fue asombroso. Sus canciones se ubicaron de inmediato en el top de las listas de preferencia. Todos quedaban asombrados por la calidad de su voz y por su estilo interpretativo. El libro de récords Guinness la catalogó como la única voz del mundo que alcanza un registro vocal de cinco octavas, muy parecido a un silbido.

Con el éxito económico y la fama vinieron problemas. Su familia trató de quitarle el control de su cuenta bancaria, presentaron un certificado médico en el que se establecía que tenía problemas mentales que la incapacitaban para manejar su plata.

La artista se defendió y demostró que todo era falso, que su familia solo quería quedarse con su dinero. A pesar de ello, nunca abandonó a su madre y a sus hermanos, a quienes ayudaba económicamente.

Los espectáculos navideños de esta cantante se hicieron famosos. Eran esperados por el público por la belleza y buena producción.

Mariah sostuvo una relación sentimental con su productor, Tonny Mottola, que era 21 años mayor que ella. Se casaron en una gran boda y se fueron a vivir a una mansión en Nueva York. En el libro biográfico cuenta que su etapa de casada fue un verdadero tormento, pues su esposo era demasiado celoso y obsesivo.

Controlaba toda su vida. Le puso guardias de seguridad las 24 horas del día y colocó cámaras de filmación en toda la casa, cuyas cintas revisaba todos los días para ver que hacía mientras él no estaba presente. Todo ello le hizo daño mentalmente, tanto así que tuvo que ser internada en una clínica de reposo al ser diagnosticada con agotamiento mental.

En 1998 se divorciaron y durante casi 10 años tuvo una vida casi tranquila. Se volvió a casar, esta vez con el actor y productor de cine Nick Cannon, con quien tuvo dos hijos, Moroccan y Monroe Cannon, pero se divorció en 1998.



Entre 1998 y 2001 tuvo una mediática relación sentimental con al cantante mexicano Luis Miguel, que terminó mal, con acusaciones de abusos físicos e incitación al consumo desmedido de alcohol. Luego de este romance ella volvió a ser internada en una clínica de reposo, esta vez con depresión.

Todo ello y en detalle se narra en The meaning of Mariah Carey, que ya está a la venta en EEUU y en Europa, y que como todo lo que produce esta artista, es éxito de ventas.