Lo cultural en Santa Cruz adopta nuevas facetas y se adapta a los cambios, gracias al esfuerzo conjunto entre artistas e instituciones

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4 de septiembre de 2022, 4:32 AM
4 de septiembre de 2022, 4:32 AM

En mayo de este año, al finalizar el recital del Coro y Orquesta Arakaendar (Bolivia) con el Royal College of Music Barroque Orchestra (Reino Unido) en el templo de San Roque, Ashley Solomon, director del grupo boliviano, agradeció la oportunidad de volver a encontrarse con el público del Festival de Música Barroca, luego de una larga pandemia que no lo permitió. Aquella noche, lanzó una frase inolvidable: “La música nos permite respirar y también curar heridas”.

De alguna manera, lo dicho por Solomon sintetiza eso que hace posible el arte: acercar a la gente, algo que parece cada vez más necesario en momentos en los que se escucha con más frecuencia hablar de división y desencuentros.

El retorno del festival en 2022 es uno de los ejemplos de lo que se puede lograr desde la gestión cultural y desde el esfuerzo de cada uno de los actores de la cultura en la región, tras tiempos verdaderamente difíciles para el sector. Santa Cruz ha demostrado, una vez más, que se mantiene como ese espacio desde el cual se construye y se logra consolidar como un polo de desarrollo artístico y cultural en Bolivia.

Dentro de esta realidad, se destaca la gestión que en Santa Cruz ha combinado el capital artístico con el financiero, que, desde fines la última década del siglo XX, permitió que la cara de Santa Cruz adopte una nueva faceta gracias a un esfuerzo conjunto, que logró hacer que la balanza de producción y difusión cultural de Bolivia se inclinara hacia la tierra cruceña.

Resultado de esta labor fue la consolidación de festivales, ferias, orquestas, espacios culturales e instituciones que han avanzado a la par del florecimiento de nuevos talentos en el campo artístico.

Percy Áñez, presidente de la Asociación pro Arte y Cultura (APAC), piensa que todo puede ocurrir desde los lugares insospechados; para ello, es importante siempre soñar en grande. 

“A finalizar el Festival de Temporada de Música y Teatro Chiquitos 2022, pudimos apreciar el talento de un chelista de 10 años. Uno lo ve y se asombra de lo que hace, porque el chelo es más grande que él. Luego explica que practica desde los ocho años. Es decir, hace dos años todos estábamos escondidos en nuestras casas, mientras que este muchacho, como si se tratara de la guerra, empezó a tocar el chelo. Eso fue un acto de sobrevivencia, es lo hermoso que se puede lograr cuando uno sueña en grande”, menciona Áñez.

El directivo de APAC está convencido de que la clave para el avance en el tema cultural está en la solidaridad y en la capacidad de generar una asociación espontánea entre personas e instituciones.

“Nos reunimos por un fin común, noble; incluso, teniendo intereses contrapuestos en otras áreas. Es increíble que tengamos 30 orquestas, cientos de personas que viven de eso, con un nivel artístico capaz de competir en cualquier lugar del mundo; tenemos limitaciones, múltiples problemas y aun así salimos adelante. Es un crecimiento orgánico y sostenido. Esa actitud es la que hace que Santa Cruz progrese en lo cultural”, agrega.

La secretaria de Cultura del municipio, Sarita Mansilla, manifiesta que le tiene mucha fe al liderazgo de la gente y considera este aspecto como un ingrediente vital para el crecimiento de la sociedad.

“Al cruceño no se le ha dicho qué hacer, siempre supo qué hacer, porque tiene muy claro su sentido de la libertad y eso se lo ha repetido de generación en generación. Al cruceño se le ha permitido y se le ha aplaudido todo lo que crea y ha tenido la libertad de poder crear, eso es importante para el desarrollo”, afirma Mansilla.

 “La economía y la cultura son actos creativos. Una persona que ejerce una industria está creando tal como lo haría un artista. Hay mucho talento en Santa Cruz de la Sierra. El cruceño es un artista nato, que hay que seguir apoyando”, agrega la autoridad.

Desafíos

La Cámara Departamental del Libro de Santa Cruz enfrentó sus propios desafíos al organizar la Feria Internacional del Libro 2022, la primera después de dos versiones irregulares debido a la pandemia.

La presidenta de la institución, Ruth Hohenstein, indica que el éxito de la feria tiene su base en el trabajo en conjunto de los asociados, de la misma forma que ocurre con todas las actividades y proyectos de la Cámara, como los que lleva adelante por estos días.

“Estamos reactivando las ferias provinciales y las ferias de distrito. No vamos solo como libreros, sino que también llevamos escritores, artistas, cuentacuentos, además que recibimos apoyo de las universidades, como la Domingo Savio. Estamos con un proyecto de fomento a la lectura en todos estos lugares. Todo es a base de trabajo conjunto”, explicó Hohenstein desde Montero, donde se lleva adelante una feria del libro organizada por la Cámara.


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