Cara a Cara

El último apaga la luz en el gabinete de Boris Johnson. El primer ministro británico hace equilibrios en una cuerda que está por soltarse. Varios de sus más estrechos colaboradores renunciaron, y pueden ser más en los próximos días. Sin embargo, él se aferra al poder y se rehúsa a renunciar, a pesar del pedido de sus allegados y también de su partido. Hay una bronca acumulada en su contra por varios escándalos que rodearon a su mandato; el más grave tiene que ver con un miembro de su gabinete, acusado de toqueteos sexuales a hombres. Pese al oprobio social, Johnson miró a un costado, como si nada pasara. Pero nunca es así. Las facturas siempre se pagan.

 Comenzaron las obras que enlazarán el puente del Urubó con la ciudad de Santa Cruz de la Sierra. Sin duda hay incomodidad por el tráfico que se genera, pero también hay esperanza. Sobre todo, porque se hace realidad el anhelo de tener conexión, nada más que eso, entre un municipio y otro, la cual fue negada de manera absurda por la pasada gestión municipal. Hay que aplaudir la iniciativa de abreviar el tiempo que durará el atasco e implorar que la incomodidad no altere el ánimo de los conductores. Lo peor sería que, al caos del tráfico, se sumen las bravuconadas y la imprudencia.

 Y ya que hablamos de tráfico, una de las tareas urgentes para el municipio es ordenar la circulación de camiones de alto tonelaje por el cuarto anillo de circunvalación. Ya esa es una vía de alto tráfico, que se ve afectada por el paso de estos motorizados. Ojalá se gobernara pensando en mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.