San Rafael grita por ayuda y el fuego rodea a comunidades en Concepción
Hay 45 incendios en 17 municipios. Temen que el fuego llegue a la zona de Monte Verde, donde cinco comunidades están en riesgo. El alcalde de San Rafael ratifica que la ayuda no llegó a ese municipio
El fuego es implacable y hay cinco comunidades de la TCO Monte Verde, en Concepción, que están en alerta roja, donde este miércoles el fuego llegó a una de ellas. Mientras tanto, en San Rafael siguen a la espera de ayuda para sofocar el fuego que afecta a su reserva.
“Las llamas están a 200 metros de nuestras casas, el calor y el humo es insoportable. Estamos haciendo todo lo posible para contener el fuego”, informó Marcelino Cruz, presidente de la OTB de Puerto San Pedro.
El fuego ya afectó sus áreas productivas, pastizales y el agua está contaminada por las cenizas. “Los comunarios con los soldaditos que llegaron estamos haciendo lo posible para evitar que el fuego no pase. Lamentablemente la ayuda llegó tarde, cuando ya se quemó casi todo. Los animales se quedaron sin pastura y nosotros tampoco tenemos qué comer.
Estamos pasando momentos de mucha angustia”, dijo Vania Vargas, dirigente de Puerto San Pedro.
Pánfilo Paniagua, otro comunario de Puerto San Pedro, pidió a las autoridades equipamiento para los bomberos comunales, alimentos, medicamentos y forraje para los animales que se quedaron sin pastura.
Puerto San Pedro es una comunidad indígena que está dentro de la TCO de Monte Verde, ubicada a 96 kilómetros de Concepción y cuenta con 60 habitantes.
El comando de incidentes recomendó evacuar a las comunidades de Monte Verde, Makanaté, El Regreso, Sagrado Corazón de Jesús y Puerto San Pedro, que están en peligro de ser alcanzadas por el fuego.
Una comisión del municipio y otra de Apoyo para el Desarrollo Campesino-Indígena del Oriente Boliviano (APCOB) se trasladaron a estos lugares para persuadir a los comunarios ante la negativa de algunos de dejar sus casas y pertenencias.
Arturo Revollo, coordinador de APCOB, informó que la comisión ingresó para consultar sobre las medidas a tomar, porque se hace necesario la evacuación o salir a un lugar seguro, porque el fuego avanza y puede ingresar a esos lugares en estos tres días.
“Son las comunidades que están en alerta roja, sin descartar otras como Río Blanco que también están en peligro”, informó.
Indicó que algunos de los representantes de esas comunidades están saliendo a buscar apoyo, porque llevan días sin dormir intentando contener el fuego, pero son comunarios que “apenas tienen botas, casco, machete y baldes de agua”.
“Ningún esfuerzo es suficiente, porque realmente la situación es muy difícil”, dijo y ahora están intentando combatir con bomberos chilenos y españoles.
En San Rafael
En San Rafael la situación sigue siendo crítica y, aunque este miércoles cayó una leve llovizna en el pueblo, no llegó a la zona de incendios.
El alcalde Jorge Vargas Roca manifestó que esperan que una lluvia ayude a sofocar el fuego que avanza en dos frentes porque siguen esperando la ayuda del Gobierno nacional.
Durante los actos por la efeméride departamental, Vargas incluso rompió en llanto ante tanta devastación y la falta de apoyo.
Este miércoles, el burgomaestre rechazó las declaraciones del viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, quien sostuvo que el Gobierno asistió al municipio con bomberos y ayuda humanitaria.
“La ayuda que dice (el viceministro) para las 680 familias no ha llegado, sigue en las bodegas de Defensa Civil (en Santa Cruz)”, señaló Vargas al manifestar que esos alimentos están allí hace quince días, porque, al parecer, no hay la logística para hacerlos llegar hasta San Rafael.
El burgomaestre insistió en el pedido que se instale un comando de incidencia en la zona para que el Comando Conjunto de Reacción a Emergencias Adversas (CCREA) se haga cargo de la contingencia, toda vez que el municipio lleva tres meses con declaratoria de desastre por incendio y todo el año por sequía, pero no ven una respuesta efectiva de parte de las autoridades nacionales.
Señaló que ha enviado notas haciendo conocer que los esfuerzos locales ya no abastecen ante la magnitud de los incendios. “Los recursos se han agotado, necesitamos ayuda”, insistió.
Asimismo, señaló que es el Gobierno, a través de la ABT y el Ministerio de Medio Ambiente, quien debe realizar el monitoreo de los focos de calor y reportarlos a los municipios para su verificación, y no al revés, como lo ha indicado el viceministro.
Actualmente, este municipio enfrenta dos focos de incendio, uno de ellos en el Área Protegida Municipal San Rafael, un corredor biológico que conecta el Bosque Seco Chiquitano con el Pantanal. “Ahora que el Pantanal ha ardido, los animales buscan refugio en este corredor, pero si sigue quemándose, ¿dónde irán?”, cuestionó.
Vargas detalló que más de 500.000 hectáreas han sido destruidas en su municipio, y que el esfuerzo de menos de 50 hombres, incluidos los bomberos municipales y los de Ángeles de Fuego, no es suficiente para controlar la situación. Incluso, él mismo se ha puesto su traje de bombero para salir a combatir el fuego en primera línea.
De acuerdo con la Gobernación, el departamento es azotado por 45 incendios en 17 municipios. Once son catalogados como complejos de incendios porque se extienden por kilómetros.