El reto lo iniciarán a fin de mes. Quieren ser los primeros alpinistas bolivianos en llegar a la cumbre del K2, que se encuentra en la frontera entre Pakistan y China.

10 de junio de 2021, 23:40 PM
10 de junio de 2021, 23:40 PM

El paceño Hugo Ayaviri (43 años) y la francesa naturalizada boliviana Anne Bialek (51 años) escalarán a fines de mes la montaña K2, una de las más difíciles del mundo, con el objetivo de llegar a la cima y convertirse en los primeros alpinistas bolivianos en lograrlo sin la ayuda de tubos de oxígeno.

El K2, que se encuentra en la frontera entre Pakistán y China, es un nevado que tiene una altura de 8.611 metros. Es el segundo más alto del mundo, solo por detrás del Everest (8.848).

Como dato, al Everest lo escalaron con éxito cerca de 9.000 personas, mientras que al K2 solo lo consiguieron 450.

Esta montaña también forma parte del grupo denominado los “14 ochomiles”, cuyos cerros superan los 8.000 metros de altura.

Hasta el momento ningún boliviano logró hacer cima en el K2, por eso Ayaviri y Bialek tienen ahora la posibilidad de hacerlo.

“Me siento feliz por ser uno de los primeros bolivianos en ir allá. Será bastante complicado porque veo que serán tres factores para poder llegar allá: el humano, el tiempo y la montaña. Es considerada una de las más peligrosas del mundo, por lo que hay que ir bien preparados”, sostuvo Ayaviri, quien por haber nacido en la comunidad Una, en las faldas del Illimani, estuvo ligado al alpinismo desde pequeño.

“Antes de llegar a Bolivia yo no hacía alpinismo, pero cuando vine lo pude conocer gracias a mi empresa de turismo, entonces decidí probar esta actividad y me gustó. Desde entonces he ganado mucha experiencia, pero será la primera vez que buscaré hacer cumbre en una montaña de 8.000 metros”, señala Bialek, quien desde hace 14 años vive en el país y que el 31 de mayo de este año consiguió su naturalización.

Al nevado se le conoce como “montaña salvaje” debido a todas las dificultades que presenta como el hielo, frío y su topografía, que la convierten en la segunda en porcentaje de fatalidades de los “ochomiles”, pues de cada cuatro personas que hacen cumbre una muere intentándolo.