La agresión contra el servicio de seguridad de la política se produjo en la noche del miércoles en un barrio del sur de la ciudad.

1 de octubre de 2020, 15:59 PM
1 de octubre de 2020, 15:59 PM

El vehículo de la escolta de la conocida mediadora de paz colombiana Piedad Córdoba resultó impactado con un disparo en un presunto intento de robo en Bogotá, aunque la exsenadora deslizó este jueves la sospecha de un atentado.

La agresión contra el servicio de seguridad de Córdoba se produjo en la noche del miércoles en un barrio del sur de la ciudad. 

Los dos escoltas estaban en el auto blindado, sin la política adentro, cuando fueron intimidados por "sujetos que se movilizaban" en un vehículo, según informó la policía en un comunicado.

A uno de los agentes le robaron el arma y el chofer aceleró, tras lo cual dispararon contra la camioneta asignada a Córdoba para su protección. El agresor que le quitó el arma al escolta fue capturado, añadió.

Sin embargo la excongresista de 65 años, quien participó activamente en el proceso de paz de 2016 que permitió el desarme de la guerrilla de las FARC, puso en entredicho esa versión. 

"¿Quién moviliza 8 hombres armados en varios vehículos para atacar a una camioneta y finalmente solo robar un arma?", escribió en Twitter.

En entrevista con la W radio, Córdoba dijo que el episodio le parece "muy similar" al de su secuestro en 1999 por paramilitares de ultraderecha que la tuvieron en su poder por unos días antes de liberarla. 

También reveló que lo ocurrido el miércoles coincide con sus planes de comparecer ante la Comisión de la Verdad -un órgano extrajudicial que fue creado como parte del pacto de paz de 2016- para contar lo que sabe sobre el asesinato del excandidato presidencial conservador Álvaro Gómez, ocurrido en 1995 en Bogotá.

Declarado por la justicia como crimen de lesa humanidad, el caso sigue en investigación y entre las hipótesis sobre los responsables está la de una alianza de políticos rivales, militares y carteles de la droga.

No obstante, Córdoba desestimó esa suposición y aseguró que sabe quién mató a Gómez y que tiene pruebas que lo demostrarían.

"Yo estoy comprometida con la verdad, cuésteme lo que me cueste", declaró la exsenadora, sin dar pistas sobre los presuntos responsables del crimen.

Además de su apoyo al proceso de paz, Córdoba ayudó a la liberación de decenas de secuestrados por los rebeldes marxistas en 2007.