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Austeridad y desigualdad también castigan a África oriental
Los habitantes de África oriental requieren que los escasos recursos estatales atiendan sus necesidades básicas antes que gastos como el servicio de la deuda pública
Los países de África oriental, castigados por la pobreza y desigualdad estructurales, conflictos armados, plagas, fenómenos meteorológicos extremos y la covid-19, encaran también políticas de austeridad que reducen el acceso a beneficios fundamentales, advirtió la coalición internacional contra la pobreza Oxfam.
Con los recortes del gasto “la región se arriesga a caer en un círculo vicioso de servicios de salud insuficientes, instalaciones educativas pobres y declive económico que afectará especialmente a las mujeres y las personas jóvenes”, dijo Parvin Ngala, directora de Oxfam en África central, oriental y el Cuerno de África.
La organización considera que los países de África oriental experimentaron crecimiento económico y reducción de la pobreza en las últimas dos décadas, pero sosteniendo unos elevados niveles de desigualdad, con la riqueza concentrada en pocas manos y la mayoría con dificultades para cubrir sus necesidades básicas.
El 10 % más rico de los habitantes de la región obtiene en promedio 47 % de los ingresos nacionales brutos, mientras que el 50 % más pobre tan solo percibe 13,3 %.
Los países considerados en el análisis fueron Burundi, Etiopía, Kenia, República Democrática del Congo, Ruanda, Somalia, Sudán del Sur, Tanzania y Uganda.
El Covid-19, unida a las plagas de langostas y las crisis climáticas, sumieron a la región en una crisis económica, millones de personas perdieron sus empleos, y se agravaron la pobreza y la inseguridad alimentaria.
Casi 21 millones de personas padecen graves niveles de hambre, y más de 44 millones necesitan ayuda humanitaria en Etiopía, Somalia, Kenia y Sudán del Sur.
Cuando se declaró la pandemia, la mitad de la población de África oriental tenía un acceso inadecuado a servicios de salud, 90 % carecía de protección social y 80 % de derechos laborales.
El cierre de las escuelas afectó a millones de estudiantes, especialmente a los que estaban en mayor pobreza y no tenían acceso a la educación en línea.
A mediados de enero de 2022, solo cuatro por ciento de la población de África oriental había recibido la pauta completa de la vacuna anticovid, en comparación con 71 % de los habitantes de países ricos.
Plagas de langostas azotaron a varios países en 2020, destruyendo cultivos y pastos para el ganado, y sequías e inundaciones agravaron la situación, provocando una grave inseguridad alimentaria, especialmente en comunidades rurales y nómadas.
Según Oxfam el PIB de la región (unos 390.000 millones de dólares, según el Banco Mundial) se contrajo en 15.700 millones de dólares en 2020 debido a un crecimiento menor de lo esperado, y se perdieron 7,2 % de las horas de trabajo, lo que equivale a 10 millones de empleos a tiempo completo.
“A pesar de ello, en lugar de aplicar impuestos a las personas y empresas más ricas, los gobiernos de África oriental planean reducir en los próximos años las inversiones públicas en servicios como la atención médica y la educación, o en agricultura y protección social”, señaló Oxfam.
En África oriental los gobiernos destinan cinco veces más recursos al pago de la deuda doméstica y externa que a servicios de salud, siendo esta proporción de 28 veces más en el caso de Sudán del Sur. El servicio de la deuda consumió en promedio 35 % de los ingresos gubernamentales en la región.
Durante la pandemia muchos gobiernos incrementaron su gasto en servicios de salud y protección social, pero ahora tienen planes de reducir el gasto público para disminuir su déficit presupuestario y su deuda, tal y como les recomiendan entidades prestatarias como el Fondo Monetario Internacional (FMI).
De 2022 a 2026, los nueve países planean reducir su gasto público anual en 4700 millones de dólares en comparación con 2021, lo que según Oxfam les impedirá contrarrestar el aumento de la pobreza y las desigualdades causadas por la covid.
En cambio, si pechando a las personas y empresas más ricas incrementasen sus ingresos fiscales en un punto del producto bruto, podrían recaudar 4.900 millones de dólares anuales adicionales, monto suficiente para aumentar su gasto de salud 77 % cada año, señaló finalmente la organización.
https://ipsnoticias.net/2022/04/austeridad-y-desigualdad-tambien-castigan-a-africa-oriental/