Desmenuzó las líneas de trabajo de su gestión. Rechaza la utilización de Casa Pizarro como sede de Gobierno por ser un "símbolo colonial".

28 de julio de 2021, 15:29 PM
28 de julio de 2021, 15:29 PM


El nuevo presidente de Perú, el izquierdista Pedro Castillo, anunció el miércoles en su primer discurso que enviará al Congreso un proyecto para reformar la Constitución promulgada en 1993 por el entonces mandatario Alberto Fujimori.

El primer discurso de Castillo como nuevo mandatario duró un poco más de una hora y reservó para el cierre el interés por renovar la Constitución Política del Estado. 

“Una de nuestras banderas políticas es la convocatoria a la Asamblea Constituyente para que cambie el rostro a nuestra política social”, expresó. 

Aseguró que esta convocatoria se realizará en el marco del trabajo congresal, aunque enunció las condiciones que deberá contemplar dicha asamblea. Por ejemplo, dijo que se preservará la presencia de representantes de pueblos indígenas originarios.

A decir de Castillo, Perú no puede estar "condenado a seguir prisionero de esta Constitución" de 1993 y anunció que presentarás ante el Congreso un proyecto ley para reformarla.

La propuesta de campaña de Castillo de cambiar la Constitución vigente, que privilegia el liberalismo económico, fue rechazada por su rival Keiko Fujimori, hija del expresidente, y por otros adversarios políticos.

"Tendremos que conciliar posiciones con el Congreso", indicó el nuevo mandatario, cuyo partido Perú Libre tiene solo 37 de los 130 escaños en el Parlamento.

Curiosamente, la llegada de Perú Libre al poder supone la primera vez que un partido del interior del país alcanza, democráticamente, la presidencia, resaltó Castillo en su discurso. 

En su discurso también dijo que  la riqueza histórica y cultural de Perú fue truncada en la era colonial con el establecimiento de “castas y divisiones que hasta hoy existen”. 

Denunció el “régimen racial impuesto por el virreinato” y que se extendió durante muchos años más a pesar de la independencia.

Con respecto a las líneas de trabajo que guiarán su gestión, dijo que su compromiso es “con el pueblo y para el pueblo” y “no los defraudaré”.

Castillo también prometió la creación de un “sistema de salud universal, gratuito y descentralizado” para que ningún peruano se quede sin cobertura médica. Para ello, pidió a los gobernadores que ubiquen los terrenos donde se construirán los nuevos hospitales.

En temas económicos,  Castillo fue claro al decir que no habrá proceso de expropiación y garantiza el “respeto a la propiedad privada, pero anteponiendo el interés de la nación”.

El mandatario habló sobre la necesidad de transformar el modelo económico que permita “redistribuir las riquezas”. Dijo que este es un mandato que emana de la gente, puesto que “la población pide cambios y no está dispuesta a renunciar a ellos”.

A pesar de su intención de calmar los mercados, Castillo también deslizó que pretende “acabar con los abusos de los monopolios” que afectan al ciudadano como en los casos registrados del servicio de gas o en el acceso a medicamentos. “No estatizaremos la economía”, expresó en el intento de calmar a los empresarios que todavía desconfían de la política del nuevo mandatario.

Del mismo modo, dijo que luchará contra la corrupción, que “nos cuesta dos terceras partes del gasto público”. Para ello, promete “sancionar con dureza” a los corruptos y recordó que en el marco de las investigaciones de Lava Jato hay tres presidentes implicados, pero “ningún empresario detenido”.

La entrega de 700 soles (la moneda nacional de Perú) a cada familia necesitada será otra forma de respaldar a quienes han perdido el trabajo durante la pandemia. Son más de dos millones de personas que quedaron sin trabajo durante la crisis consecuente a la pandemia, manifestó.

Educación, cultura, ciencia, industria, inversión, medioambiente o desarrollo hidrocarburífero con Petro Perú completan el programa de acciones comprometido por el mandatario.

Castillo determinó romper con los “símbolos coloniales” y rechazó gobernar desde Casa Pizarro, edificio que lo cederá al Ministerio de Culturas para que sea usado como un museo.

Indicó que fortalecerá las rondas campesinas como apoyo al trabajo de seguridad que desarrolla la policía. 

El maestro rural de Cajamarca (norte) prometió además que cuando culmine su mandato, el 28 de julio de 2026, retomará sus "labores docentes de siempre".