El matrimonio de personas del mismo sexo sigue siendo ilegal en ese país. También existió una movilización de conservadores

16 de julio de 2022, 17:30 PM
16 de julio de 2022, 17:30 PM

La Marcha del Orgullo volvió a recorrer el sábado las calles de Seúl, capital de Corea del Sur, tras dos años de pausa por la pandemia de coronavirus, entre banderas arcoíris y manifestaciones de grupos conservadores.

Miles de personas, bailando con música pop a todo volumen, desafiaron la lluvia torrencial en Seúl, acompañados de un importante cordón policial para mantener separados a los participantes de los manifestantes conservadores, en su mayoría cristianos.

Un activista, que dijo a la AFP que se llamaba Joy, explicó que "la sociedad surcoreana todavía tiene un largo camino que hacer" en el reconocimiento de los derechos LGTBQ+.

"Vivimos una situación en la que se niega nuestra existencia", añadió.

El matrimonio de personas del mismo sexo sigue siendo ilegal en Corea del Sur, y los activistas insisten en la necesidad de regular la discriminación por la orientación sexual.

Encaramados a andamios a lo largo de la Marcha, manifestantes contrarios al Orgullo (algunos vestidos de manera militar) desplegaron carteles con consignas en inglés como "Homosexuality is Sin" ("La homosexualidad es pecado" y "No!! Same-Sex Marriage" ("Matrimonio de [personas del] mismo sexo ¡No!"). 

La homosexualidad "está mal. Trae corrupción moral y desorden social. No podemos dejar que exista en Corea del Sur", dijo Hong Sung-bo, un manifestante.