El conteo del órgano electoral, ONPE, llegó ayer al 100% de mesas contabilizadas. Hay llamados de legisladores electos que proponen la anulación de los comicios. El presidente interino Francisco Sagasti pide esperar los resultados con calma

16 de junio de 2021, 8:02 AM
16 de junio de 2021, 8:02 AM

El candidato presidencial Pedro Castillo, que encabeza con 50,12% el escrutinio en Perú, dijo ayer que siguen esperando un resultado oficial y lamentó que políticos de derecha que apoyan a la candidata Keiko Fujimori estén pidiendo anular las elecciones por supuesto fraude.

Nueve días después de una reñida segunda vuelta, el conteo del órgano electoral (ONPE) llegó al 100% de mesas contabilizadas, otorgando a Castillo 8.835.579 votos (50,12%) sobre los 8.791.521 de Fujimori (49,87%).

Fujimori ha denunciado “fraude” en los comicios del 6 de junio y ha pedido al Jurado Nacional de Elecciones (JNE) que anule los votos de 151 mesas de sufragio.

Perú espera entonces, en medio de la incertidumbre y algunas movilizaciones de calle en favor de ambos candidatos, el veredicto del JNE para saber quién será su próximo presidente.

Los comicios, que contaron con el 74,5% de participación, fueron calificados como transparentes por diversos observadores, entre ellos de la OEA, que dijeron que no hubo “graves irregularidades”.

“Se sigue llamando a tumbarse una elección”, dijo Castillo a corresponsales de prensa extranjera en la sede de su partido en Lima.

“Creo que no debemos precipitarnos y menos aún usar palabras indebidas como fraude y esperar los resultados con calma”, declaró ayer el presidente interino, Francisco Sagasti.

“La democracia tiene reglas y plazos que todos debemos respetar”, declaró a su vez el cardenal Pedro Barreto sobre los llamados a anular los comicios, y dijo que la Iglesia católica “está disponible” para mediar con el fin de superar la “dolorosa y frustrante incertidumbre” que vive el país..

Entre “fraude” y auditorías

Fujimori, que denuncia “fraude” y ha pedido anular miles de votos, solicitó además una “auditoría informática” a la ONPE, mientras el JNE revisa las impugnaciones.

Ambos órganos electorales están bajo fuego de los sectores más radicales que apoyan a Fujimori, que temen que la revisión de las impugnaciones por parte del JNE no impida un triunfo de Castillo.

La ONPE organiza los comicios y cuenta los votos, mientras que el JNE resuelve las impugnaciones y proclama al ganador oficial.

El almirante retirado y parlamentario electo Jorge Montoya llamó el lunes a anular los comicios y convocar “nuevas elecciones con auditores internacionales”, al asegurar en Twitter que el sistema electoral peruano “ya no brinda confianza”, por lo que deben renunciar los jefes de la ONPE y el JNE.

Montoya es además uno de los 64 generales y almirantes retirados que -en sintonía con Fujimori- pusieron en duda el lunes la transparencia de los comicios, lo que llevó al Ministerio de Defensa a expresar que este grupo de oficiales jubilados “no representa a las Fuerzas Armadas”.

“La posición que está tomando un grupo de la derecha es sediciosa, pero el país está en calma. Son grupos políticos de la vieja derecha de estilo pinochetista que creen que Keiko no va a ser presidenta y quieren en su reemplazo poner al almirante Montoya como presidente de transición”, dijo ayer a la AFP el analista Hugo Otero, exasesor del expresidente Alan García.