"La isla está totalmente devastada", asegura el ministro del Interior desde Mayotte tras el paso del ciclón Chido
Indicó que muchos habitantes de la isla son de confesión musulmana, que entierran a sus muertos en 24 horas, lo que dificultará llegar a un balance definitivo.
La isla principal de Mayotte "está totalmente devastada", reconoció el ministro francés del Interior en funciones, Bruno Retailleau, durante una conferencia de prensa desde ese territorio del Índico tras el paso del ciclón Chido.
El ministro participó a distancia en una reunión de crisis presidida por Emmanuel Macron, que estaba en París, y que aseguró que en los próximos días viajará a Mayotte y que decretará un duelo nacional.
Tras visitar numerosos puntos de la isla francesa en el Índico, Retailleau aseguró que por ahora es imposible hacer un balance de víctimas mortales, que necesitará "varios días", pero se mostró convencido de que será "muy duro".
Indicó que muchos habitantes de la isla son de confesión musulmana, que entierran a sus muertos en 24 horas, lo que dificultará llegar a un balance definitivo.
El ministro afirmó que el 90 % de las viviendas se han visto afectadas, sobre todo las 'bidonvilles', las aglomeraciones de chabolas, que han quedado totalmente arrasados, mientras que las infraestructuras de transportes han sufrido importantes daños materiales, lo que dificulta la llegada de los servicios de emergencia.
Retailleau aseguró que las necesidades más urgentes son de agua y alimentos, y advirtió de que hasta dentro de 48 horas las plantas potabilizadoras no llegarán hasta el 50 % de su capacidad y necesitarán al menos una semana para llegar al 95 %.
Eso en una isla que ya tiene problemas de abastecimiento de agua potable en condiciones normales, señaló el ministro, que añadió que un avión de transporte militar A400M será dedicado a aportar agua mineral y comida de forma exclusiva, lo que aportará 20 toneladas en cada trayecto.
Las autoridades trabajan para restablecer el aeropuerto, que por ahora solo puede funcionar por el día, para multiplicar el puente aéreo que han establecido desde la isla de La Reunión, a dos horas de trayecto, donde se centraliza el auxilio a Mayotte.
En total, dijo, Francia tiene trece aeronaves desplegadas para servir de cordón sanitario a la isla, a los que se suman los aparatos de tres compañías comerciales que los han dedicado a esos fines.
Retailleau indicó que el puerto ha sufrido daños, pero funciona con normalidad, lo que permitirá la llegada de ayuda en barcos portacontenedores en los próximos días.
También se van a enviar materiales de construcción y viviendas modulares desde Francia, que está a 8.000 kilómetros, para comenzar a reparar el enorme destrozo en el parque de viviendas del territorio.
En cuanto a los hospitales, el ministro comentó que progresivamente estarán al 40-45 % de su actividad, y agregó que el jueves comenzará a funcionar un hospital de campaña.
El ministro dijo que no se han registrado grandes problemas de orden público, pero señaló que el prefecto de la isla tendrá la potestad de decretar un toque de queda si lo considera necesario.
Defendió que su ministerio envió las alertas adecuadas pero señaló que buena parte de inmigrantes irregulares que hay en la isla, cerca de la mitad de sus 320.000 habitantes, no siguieron las consignas de las autoridades para refugiarse en lugar seguro.
Un argumento que también utilizó el primer ministro, François Bayrou, que participó desde su feudo de Pau, en el suroeste de la metrópoli, en el gabinete de crisis presidido por el presidente Maron.
"Me he asegurado de que el conjunto de las medidas de urgencia para ayudar a los habitantes de Mayotte han sido adoptadas", escribió el presidente en la red social X.
Añadió que acudirá a la isla "en los próximos días", manifestó que la prioridad "está en la ayuda de urgencia pero también comenzar a preparar el futuro" y anunció que se decretará un duelo nacional.
"En la isla hay una presencia de muchos irregulares de nacionalidad extranjera, por tanto no identificados", aseguró Bayrou, que expresó que esa circunstancia dificulta tener un balance de víctimas.
Hasta ahora, el balance oficial habla de 20 muertos, pero el prefecto (delegado del Gobierno), François-Xavier Bieuville, avanzó en la noche del domingo que podría haber "varios cientos de muertos", cifra que podría alcanzar "varios millares".
Retailleau afirmó que en las próximas horas se declarará el estado de catástrofe natural, pero recordó que solo el 10 % de los habitantes de la isla tiene seguro, lo que les impide acceder a las ayudas excepcionales, por lo que recalcó que se creará un fondo especial de ayuda. EFE