La reelección de este antiguo magnate del petróleo llegado al poder en 2016 y que gobierna con mano de hierro no parece peligrar

11 de abril de 2021, 16:25 PM
11 de abril de 2021, 16:25 PM


Los benineses eligieron a su presidente este domingo tras una campaña sin entusiasmo marcada por la violencia en el centro del país, donde los manifestantes protestaron contra unos comicios confiscados por el jefe del Estado saliente Patrice Talon.

La reelección de este antiguo magnate del petróleo llegado al poder en 2016 y que gobierna con mano de hierro no parece peligrar. Sus adversarios son dos candidatos prácticamente desconocidos, los exdiputados Alassane Soumanou y Corentin Kohoué. 

Los 15.531 colegios electorales cerraron a las 16:00 (13:00 hora de Bolivia) y el escrutinio empezó inmediatamente. 

En los colegios electorales visitados por la AFP en Cotonú, la capital económica, la tasa de participación no superó el 30% y Patrice Talon se perfilaba como claro ganador.

"La votación se desarrolló bien aquí, no tuvimos ni incidentes ni problemas", declaró Ricardo, un estudiante de informática de 23 años, que recopilaba los resultados para el movimiento presidencial, al que apoya. 

"Tuvimos una afluencia bastante baja. La gente no ha salido demasiado. Según los primeros resultados de aquí, el presidente va en cabeza", agregó.

La mayoría de los opositores están exiliados, condenados por la justicia o inhabilitados para participar debido al nuevo Código Electoral y a una reforma institucional.

Elogiado durante mucho tiempo por su vitalidad democrática, este país africano ha vivido una campaña anodina en el sur, mientras que el norte ha sido escenario de violencias.

Desde el martes, los habitantes de varias ciudades del centro y norte del país, feudos de la oposición, bloquearon con barricadas el tráfico.

El ejército las desmanteló el jueves y liberó la carretera recurriendo a disparos de balas reales. Al menos dos civiles murieron y otros cinco resultaron heridos.

"Militares que disparan contra nuestros hijos. Pareciera que estamos en una película. Si el presidente tiene problemas con los opositores, que proteja al pobre pueblo", lamentó Philomene M'Betti Tepa, una ciudadana de Boukoumbe, en el noroeste del país.

Este domingo, en Savè, en el centro-norte del país, los colegios electorales permanecieron vacíos todo el día, y algunos incluso fueron incendiados, según un periodista de al AFP en el lugar.

- "Victoria por KO" -

En estos comicios, los benineses debían elegir por primera vez a un vicepresidente

Patrice Talon es el único que nombró como candidata al puesto a una mujer, Mariam Talata, una profesora de filosofía de 57 años tan carismática como feminista.

"Hay que educar a unos y otros para que las frustraciones no desemboquen necesariamente en la violencia", declaró el jefe del Estado, de 62 años, al votar en un colegio electoral de Cotonú.

Además de la ausencia de una oposición fuerte, el presidente puede confiar en su reelección por su buen balance económico: la producción de algodón (uno de los principales recursos del país) aumentó considerablemente, la pequeña corrupción prácticamente ha desaparecido y se construyeron muchas carreteras.

Pese al coronavirus, el país logró crecer en 2020.

"Apoyo al presidente Talón porque antes teníamos muchos problemas. El agua y la electricidad se cortaban todo el tiempo. Ahora es mucho mejor", aseguró Ulrich Adjalla. 

Sin trabajo desde que terminó sus estudios de sociología, este beninés de 28 años está convencido de que Talon "creará empleos para la juventud".

En Benín, el 38% de la población vive bajo el umbral de pobreza y el desempleo de los jóvenes está disparado. Para su próximo mandato de cinco años el presidente, que estaba convencido de lograr una "victoria por KO" en los comicios de este domingo, prometió continuar con "el desarrollo", según su eslogan de campaña.