En un nuevo video, difundido en el programa uruguayo Santo y Seña, el buscado Marset anunció que tomará acciones el próximo año y que entonces sabrán si es "ángel o demonio"

3 de diciembre de 2023, 22:45 PM
3 de diciembre de 2023, 22:45 PM

“Búsquenme nomás, yo no voy a entregarme nunca”, declaró el narcotraficante Sebastián Marset Cabrera en un nuevo video que hizo público este domingo, y que fue difundido en el programa uruguayo Santo y Seña. Añadió que nunca estuvo en sus planes entregarse ni negociar una presunta entrega.

Aprovechó el mensaje para hacer una velada amenaza a la clase política -que definió como “mafia”:

“Quiero terminar el año tranquilo con mi familia; pero el próximo año sabrán si soy ángel o demonio. La mafia de la política es la peor, la más traicionera; pero le dejo claro que no le tengo ni un poquito de miedo”, afirmó.

En el video apenas puede observarse una silueta, pero se escucha su voz.

Sobre la situación de su esposa, se mostró ofendido por la pena de 22 años que buscan imponerle. “Están mal de la cabeza, mal de la cabeza de verdad”, manifestó. Señaló que pidió que “sean justos” con su hermano; su esposa, Gianina, y su cuñado. Pero, desde su perspectiva: “La política de todos los países hace lo que quiere y están bastante en complot contra mí”.

Afirmó que no se siente acorralado y que el caso 'A ultranza' por el que Paraguay activó su búsqueda internacional “es una payasada”.

Al finalizar su mensaje, en tono burlesco “pidió perdón” a Paraguay por el uso de su espacio aéreo, donde “salieron a volar mis helicópteros”. Añadió: “Me olvidé de pedirles permiso. La próxima les aviso antes”.

El pasado domingo 26 de noviembre se emitió la primera parte de una entrevista que Santo y Seña consiguió con Marset en un lugar, que se mantiene en secreto. La primera entrega fue duramente criticada tanto en ese país como en otros, como el boliviano. Este domingo 3 de diciembre se emitió la segunda parte, que versó acerca de la vida “familiar” del narco uruguayo, buscado por interpol, que quiso mostrar “su verdad”.

En esta segunda parte, el narcotraficante uruguayo centró el mensaje en su mirada de la vida. Habló de su sentido de familia, su comprensión de la fe y otros aspectos de corte personal.