Las instalaciones suministraban combustible a las fuerzas ucranianas en dirección a la ciudad de Mykolaiv

3 de abril de 2022, 17:30 PM
3 de abril de 2022, 17:30 PM

Una serie de explosiones se escuchó la mañana del domingo en Odessa, el principal puerto de Ucrania en el mar Negro, constataron periodistas de AFP, mientras Rusia dijo que había destruido una refinería y depósitos de combustible.

Esta mañana, misiles marítimos y terrestres de alta precisión destruyeron una refinería y tres depósitos de combustible y lubricantes cerca de la ciudad de Odessa”, dijo el ministerio de Defensa ruso en Moscú.

Las instalaciones suministraban combustible a las fuerzas ucranianas en dirección a la ciudad de Mykolaiv, más al este, indicó.

Tras esas explosiones, que se sintieron hacia las 06:00 (03:00 GMT), se vieron columnas de humo negro en una zona industrial de esta ciudad portuaria estratégica, indicaron periodistas de la AFP en Odessa.

Fue un ataque con cohetes que no dejó víctimas, afirmó en un comunicado un oficial del mando regional Sur, Vladislav Nazarov.

“La región de Odessa forma parte de los objetivos prioritarios del enemigo. El enemigo continúa su práctica pérfida de atacar infraestructuras sensibles”, declaró Nazarov, quien reiteró la prohibición de informar sobre la localización o los daños provocados por los ataques.

“Los nazis rusos llevaron a cabo un ataque con misiles, algunos de los cuales fueron derribados por la defensa antiaérea ucraniana”, había dicho el ayuntamiento de Odessa en un comunicado.

Anton Herashchenko, asesor del ministro ucraniano del Interior, escribió en Telegram: “Odessa fue atacada por aire. Se observan incendios en ciertas zonas. Algunos de los misiles fueron derribados por la defensa aérea”.

Esta ciudad histórica es considerada estratégica por su puerto de gran tamaño que permite acceso al mar Negro y al resto de Ucrania.

El ataque se produce mientras se espera que el ministro griego de Exteriores, Nikos Dendias, llegue a Odessa “muy pronto”, según dijo su oficina el domingo.

Toda la costa este, de la península de Crimea, anexada por Rusia en 2014, hasta las regiones separatistas prorrusas de Donetsk y Lugansk, está ocupada por las fuerzas rusas, con excepción de algunas partes de Mariúpol, donde enfrentan la resistencia del ejército ucraniano.