Después de que el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, confirmara la muerte de los tres comunicadores de El Comercio las lágrimas y el dolor llegan a los colegas

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13 de abril de 2018, 14:46 PM
13 de abril de 2018, 14:46 PM

Una noticia que golpea, tal vez la más dura de escribir en las páginas del diario. Los colegas y amigos de los tres periodistas del periódico El Comercio de Ecuador secuestrados el pasado 26 de marzo y cuya muerte fue confirmada por el presidente Lenín Moreno, todavía no  conciben el hecho y lloran la partida de Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra.

A las lágrimas se sumaron otros comunicadores encargados de hacer la cobertura periodística del momento quienes en medio del llanto homenajeaban a sus compañeros fallecidos con la voz "nadie se cansa".

La noticia también llegó a saberse por parte de los familiares y otros colegas que se reunieron en la Plaza Grande de Quito al cumplirse el plazo de 12 horas que había dado el presidente ecuatoriano para tener noticia de los tres periodistas.

El secuestro ha sido atribuido al frente "Oliver Sinisterra", grupo armado bajo el mando de un antiguo integrante de la guerrilla colombiana de las FARC con el alias de "Guacho".

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Desde la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) condenan la actuación de los gobiernos de Ecuador y Colombia por su falta de diligencia en proteger la vida de los reporteros.

"Los gobiernos de Lenin Moreno y Juan Manuel Santos no lograron un trabajo conjunto y eficaz para conseguir la liberación oportuna de los tres trabajadores. Adicionalmente, no se acudió de manera eficiente a organizaciones internacionales humanitarias o a otros posibles mediadores -como la iglesia católica- para que facilitaran la liberación", reza un comunicado emitido tras darse a conocer el suceso.

Ecuador y la comunidad periodística están de luto. En el portal web de El Comercio se anunció la noticia y 'se apagaron' los colores en señal de luto. Sobran las palabras.

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