Opinión

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Cara a Cara

17 de mayo de 2022, 4:00 AM
17 de mayo de 2022, 4:00 AM

Y cuando se relajó Bolivia y la percepción de riesgo fue arrinconada por el “no pasa nada”, los contagios comenzaron a subir y hasta duplicarse. Tras detectarse que la nueva subvariante BA.2 de ómicron está en varias regiones del país, el Gobierno anuncia que llegará en breve una quinta ola. Este nuevo escenario epidemiológico nos recomienda para quienes se rehúsan que la mejor manera de combatir la pandemia, además de sostener las medidas de bioseguridad a rajatabla, es la vacunación y el refuerzo de la misma. Existe muy bajo porcentaje de inmunizados con tercera dosis y un casi inexistente número de vacunados con cuarta dosis. Ni la mitad de menores de 18 se han vacunado alguna vez y un tercio de niños de 5 a 12. En el mundo suenan las alarmas de alerta de nuevo y acá se escuchan, aunque no hay peor sordo que el que no quiere oír.

 La falta de apoyo a los deportistas de diferentes disciplinas en Bolivia es una tradición. Cientos de historias se conocen y miles de sueños frustrados se han aparcado a la vera del camino porque a los gobiernos de turno no les ha interesado en absoluto. Ahora llama la atención que a pocas horas del inicio de la Copa América de Fútbol Playa, los jugadores de la selección desistan de viajar a competir porque les han disminuido la cuota diaria. Dicen que era Bs 50 de viáticos y con descuentos. Esa migaja no alcanza. ¿No sobrará algún ítem de un dinosaurio universitario para hacer una vaquita y dejar de hacer papelones al no presentarse? La Federación Boliviana de Fútbol se va al descenso.

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