Cara a Cara

Hay unos tres precandidatos del MAS para 2025. Y en las filas de la oposición la cifra va en ascenso, porque cada uno de los aspirantes cree ser el ‘elegido’ para resolver los problemas del país. A medida que pasa el tiempo, se aleja el pedido de un solo candidato para hacerle frente al Movimiento Al Socialismo, porque cada día aparece uno nuevo. Todo esto genera mucho desgaste, ya que los políticos optan por el ataque a los adversarios, antes que por la creatividad. A estas alturas, cuando falta poco más de un año para las elecciones nacionales, la propuesta es lo que menos trasnocha a las fuerzas que aspiran al poder.

 En 2024 debe haber elecciones primarias. La ley dice que participan los militantes de cada partido político. Sin embargo, en el Senado se ha firmado un acuerdo para impulsar primarias abiertas. De aprobarse la iniciativa, significaría que todos los bolivianos empadronados podrían votar para definir quién será el aspirante a la Presidencia de cada agrupación política. O sea, que sean los ciudadanos los que decidan quién representará a la oposición, quién al oficialismo, etc. Así se podría eliminar el negocio de los ‘taxi-partidos’, que alquilan sigas a cambio de dólares.

A los partidos también les tocará la responsabilidad de elegir bien a todos los candidatos. Para muchos, pesa más cuántos seguidores tiene un influencer, antes que cuál es su formación y su capacidad para representar a los electores en la Asamblea Legislativa o en la posición a la que aspire.

Viene un año electoral y hay que trabajar para que los ciudadanos realmente cuenten y que no sean solo instrumentos desechables del poder.