Ciertas cifras de la banca a junio 2024
Jose Luis Contreras C.*
A principios de abril de 2024, un informe del Economist Intelligence Unit (EIU) señaló problemas en el sistema bancario boliviano, como la contracción de los depósitos y el crédito, junto con un aumento de la morosidad.
Ante las preguntas de EL DEBER, la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero-ASFI desestimó el informe, afirmando que el sistema bancario estaba en buen estado y que la mora era baja en comparación con otros países. La Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban), por su parte, evitó pronunciarse, alegando estar "ocupados" con otros asuntos.
Sin embargo, tres meses después, las cifras publicadas por la ASFI revelan un aumento de Bs1,6 mil millones en los créditos vencidos y en ejecución entre junio de 2023 y junio de 2024, representando ahora el 3,39% de la cartera total, frente al 2,63% en junio de 2023.
La cobertura de las previsiones para incobrables de la cartera vencida y en ejecución, también disminuyó de 1,25 a 1,16 en el mismo período. Para mantener el nivel de cobertura del año anterior, la banca debería haber provisionado Bs718 mil millones adicionales, equivalentes al 78% de sus utilidades del primer semestre de 2024.
Anualizando la utilidad del sistema a junio 2024, el Retorno de Activos (ROA) y Retorno sobre Patrimonio (ROI) estarían 10% y 16% más abajo que los del 2023, si bien en la segunda mitad del 2024 podría haber alguna estacionalidad favorable que pueda cerrar en algo esta brecha.
La comparación de depósitos entre la gestión 2023 y los de junio 2024, es engañosa porque tropezamos con la reclasificación de depósitos de la Gestora que ascienden a aproximadamente Bs70 mil millones: en mayo de 2023 fueron reclasificados a depósitos de entidades públicas y ahora, la ASFI ha dispuesto que nuevamente sean registrados como depósitos del “publico”.
Extrapolando esta importante cifra de los depósitos del público a junio 2024, estos se han se han mantenido en términos nominales. En términos reales, sin embargo, han caído en aproximadamente BS4,7 mil millones (un 2.50%) si el IPC del INE fuera tomado como factor de ajuste.
A tres meses del informe de la EIU, hay evidencia empírica que validan su pronóstico original en lo que respecta a menores ROA, deterioro de cartera y estancamiento de depósitos.
Lo que nos lleva a evaluar la otra equivocada aseveración de la ASFI: que el nivel de mora en Bolivia es bajo comprado con otros países.
De acuerdo con la norma de la ASFI en la banca boliviana, los créditos se revisan individualmente y, dependiendo de métricas generadas previamente a la evaluación, se determina la previsión correspondiente. En créditos de menor cuantía, se provisiona en función de una tabla preestablecida de los días de mora del último pago de la cuota.
En cambio, en todos los países vecinos se aplica la Norma Internacional de Información Financiera 9 (NIIF 9), donde el activo financiero se expresa inicialmente al costo real de adquisición y luego se ajusta al valor presente del flujo de caja futuro esperado, utilizando el Tipo de Interés Efectivo resultante-
En distintos estudios de la implementación de la NIIF 9 llevados a cabo por PriceWaterhouseCoopers (PWC), Delloittes (DL) y el European Banking Autority (EBA) en los EE. UU. y Europa, se estableció que, por la adecuación a la nueva norma, se incrementaron las reservas para incobrables en aproximadamente 25% según DL, 25% acorde PWC, y 30% según el EBA. – esto, en un contexto de economías estables.
Los índices de morosidad del sistema bancario boliviano no son comparables con los de nuestros países vecinos debido a que la norma de la ASFI establece que las reservas se constituyan únicamente cuando se evidencia un evento de impago o deterioro financiero del prestatario, sin considerar el riesgo sistémico del sector, las pérdidas esperadas, el valor presente de la pérdida esperada ni la probabilidad de incumplimiento. Este método es mecanicista y limitado, no integral.
Para superar la crisis económica, es necesario transparentar las cifras del mercado utilizando metodologías probadas y ampliamente aceptadas, como la NIIF 9 entre otras. Al igual que con cualquier decisión difícil, cuanto antes se actúe, más efectiva será la solución y menor será el costo para todos.
