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Crecimiento real de la economía, no “ilusión estadística”

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1 de agosto de 2021, 6:55 AM
1 de agosto de 2021, 6:55 AM

Por Claudia Ramos/Economista del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas

Después de experimentar un fuerte retroceso en 2020, la economía boliviana muestra recuperación en los primeros meses de 2021, acompañada y respaldada por un conjunto de indicadores que ingresan a terreno positivo, como la mayor creación de empresas, el aumento de las ventas de restaurantes, el dinamismo de las exportaciones y las importaciones, el saldo comercial positivo, el incremento de las recaudaciones tributarias, la expansión de la inversión pública, los mejores indicadores en la construcción, y la disminución de la tasa de desempleo.

Al respecto, en los últimos días dirigentes empresariales, columnistas de medios de prensa, entre otros, han señalado de forma insistente y equivocada, entre ellos Gonzalo Chávez, que el crecimiento del primer cuatrimestre corresponde a un rebote estadístico; insinuando y hasta sugiriendo comparar los actuales niveles de actividad con aquellos del período pre pandemia.

Primeramente, y sólo para puntualizar, el crecimiento de la economía de un período determinado se obtiene comparando los niveles de producción del mismo en relación a aquellos de una gestión anterior, cifra que en el caso del país alcanzó un estimado del 5,3% en el primer cuatrimestre de 2021 con respecto a similar período de 2020.

Asimismo, es importante entender la dimensión del choque que la economía boliviana sufrió en 2020, y no sólo por la pandemia sino también por una deficiente gestión por parte del gobierno anterior, por lo cual esperar retornar a niveles pre pandémicos y previos al quiebre democrático en el corto plazo es inviable. La economía boliviana se recupera de forma gradual y progresiva, pero va en la dirección correcta, hacia la senda de crecimiento sostenido con redistribución de los ingresos que fue característico en el período del Modelo Económico Social Comunitario Productivo.

Varias economías del mundo también enfrentan el desafío de restablecer sus niveles pre pandemia, y en la mayoría de ellas se espera que el retorno a éstos tome unos años. Por lo mismo, es preciso que quienes emiten opiniones e insinuaciones de un rápido restablecimiento de condiciones consideren y analicen la profundidad de la crisis de 2020 y la persistencia de la amenaza de nuevas olas de la enfermedad. Así como el mismo Gonzalo Chávez reconoce al realizar la analogía de la economía con un edificio cuya estructura ha sido dañada el año pasado, no es posible esperar una completa reconstrucción de inmediato.

Un tercer elemento a precisar es que la actual tasa de crecimiento estimada de la economía no corresponde a una “ilusión estadística”. Desde noviembre de 2020, el gobierno nacional ha diseñado un conjunto de medidas orientadas a “dinamizar” la demanda interna, y no “manipularla” como erróneamente señala Gonzalo Chávez. La demanda interna ha sido uno de los motores del crecimiento económico durante la vigencia del Modelo Económico Social Comunitario Productivo, y demostró su efectividad al permitir al país sortear el complicado panorama externo y continuar mostrando tasas sostenidas de crecimiento durante los años previos a la pandemia. En 2021 la demanda interna continuará desempeñando ese importante rol.

Estas medidas de impulso a la demanda, a las que se suman las medidas de apoyo productivo y el plan de lucha frontal contra la pandemia, que en conjunto implicaron más $us 2.700 millones inyectados a la economía, van impulsando la recuperación de la actividad y el consiguiente restablecimiento de las condiciones de vida de la población. 

Finalmente, vale la pena aclarar en relación a las opiniones sobre el segundo aguinaldo y la alusión de Gonzalo Chávez a éste, que primeramente el crecimiento del segundo semestre de 2020 no fue -8,8% y que tampoco los datos mencionados por el autor muestran la forma correcta de calcular la tasa que activa dicho pago. La variable y el período contabilizados para la determinación del segundo aguinaldo es el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de un período de 12 meses hasta el segundo trimestre de determinado año, por lo que en el caso de esta gestión se considerará el crecimiento del nivel de producción acumulado en doce meses hasta junio de 2021 en relación a la producción de similar período finalizado en junio de 2020.

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