El Deber logo
22 de agosto de 2019, 4:00 AM
22 de agosto de 2019, 4:00 AM

Desde el poder se repite que el Nuevo Modelo Económico, Social, Comunitario y Productivo implementado hace 13 años por el MAS ha sido un éxito y que, a falta de un modelo alternativo, sería la única opción viable para nuestro país (Álvaro García Linera en entrevista con EL DEBER, 03/04/2019).

En las siguientes líneas me propongo a exponer los mitos del modelo, precisamente en los temas que se consideran los pilares del mismo y de esta forma desmantelar un modelo que ha sido de poco beneficio para nuestra economía.

Antes, es fundamental entender dos cosas que se explicarán en detalle más adelante. Primero, los coyunturales logros económicos del Gobierno se deben principalmente a factores externos (altos precios de las materias primas). Segundo, ¡muchos de los éxitos económicos que el Gobierno se adjudica empezaron a materializarse antes de la gestión de Evo Morales! Sin más preámbulos, pasemos a analizar el modelo en cuestión.

Mito #1: Según la Revista EcoPlural editada por el Ministerio de Economía, la bolivianización empieza el año 2006 y es un logro del modelo económico (16ª edición, pp. 12).

La realidad: La bolivianización empieza el año 2004, o sea, ¡dos años antes que Evo Morales sea presidente! Existen por los menos tres motivos que incidieron en la bolivianización (Montero y del Río, 2014), a saber: el impuesto a las transacciones financieras (ITF) implementado en 2004 por el Presidente Carlos Mesa, la apreciación del tipo de cambio que comienza el año 2005, y que se debe principalmente al aumento de la entrada de dólares por el incremento de la renta gasífera, y la ampliación del spread cambiario (la diferencia en el precio oficial de compra-venta del dólar) que también se da el año 2005.

Estas tres medidas encarecen el uso del dólar, por lo que las personas y empresas optimizan sus carteras y optan por el uso del boliviano. Por tanto, no es casualidad que la bolivianización hubiese empezado su tendencia el año 2004. De hecho, entre mediados de 2004 y finales de 2005 (antes que se implemente el nuevo modelo), la bolivianización de los pasivos financieros ya se había incrementado en más del 100% pasando del 8% al 20%.

En todo caso, si existe un mérito del MAS en el proceso de bolivianización (asumiendo que la bolivianización en si sea deseable) es el haber mantenido las políticas de sus predecesores.

En una próxima entrega seguiré con las reservas internacionales netas (RIN).

Tags