Fueron víctimas de la dictadura de Luis García Meza y asesinados por paramilitares. Solo Gloria Ardaya logró salvarse. Estaban reunidos en un pequeño departamento de la vieja calle Harrington de La Paz.

15 de enero de 2022, 12:29 PM
15 de enero de 2022, 12:29 PM

Ese 15 de enero de 1981 se cerraba el día con una intensa lluvia en la ciudad de La Paz. Esa tarde-noche ocho jóvenes dirigentes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) fueron asesinados por paramilitares de la dictadura de Luis García Meza. Arcil Menacho y Gloria Ardaya –la única sobreviviente- había confirmado esa mañana una reunión a las 14.30 en un pequeño departamento de la calle Harrington, en La Paz. Todos llegaron a la cita y tristemente fueron ejecutados. Hoy se cumplen 41 años de esa masacre y los homenajes se escuchan de todos lados.

Menacho, Jorge Baldivieso, Gonzalo Barrón, Artemio Camargo, José Luis Suárez, Ricardo Navarro, José Reyes y Ramiro Velasco fueron los ocho dirigentes el MIR que fueron ejecutados por los paramilitares. Cada uno cumplió sus labores por la mañana. 

Menacho y Ardaya eran los encargados de organizar el encuentro que debía evaluar la respuesta popular al paquete económico que la dictadura de García Meza había dictado seis días antes. No estaban conformes por la propuesta y se alista una serie de medidas.

Juan Del Granado, abogado impulsor del juicio a García Meza, recuerda que el grupo de los nueve jóvenes del MIR estaban desarrollando una labor de resistencia popular ante los atropellos de la dictadura. Estaban por terminar la reunión y un grupo de paramilitares irrumpieron en el pequeño departamento para matar a los ocho dirigentes. Solo Ardaya se salvó tras ocultarse en un rincón.


“Eran cerca de las 17:30 de la tarde; la reunión estaba concluyendo, todos coincidieron en la tarea de reforzar la resistencia democrática. Pero en ese momento llegaron en tropel, armados hasta los dientes, los paramilitares que rompiendo las puertas y los vidrios asaltaron el inmueble, atraparon a los dirigentes y de manera salvaje, estando ya detenidos e inermes, los ametrallaron por la espalda. Solo Gloria sobrevivió providencialmente, ocultándose en un primer momento del asalto, descubriéndola después, cuando ya no era posible ejecutarla”, relató Del Granado.

El abogado y exalcalde de la ciudad de La Paz pide a las nuevas generaciones valorar la lucha de los dirigentes en épocas de la dictadura y cuidar la democracia que fue restaurada en 1982. “41 años después, ya no hablemos en abstracto de la 'Harrington' y de los mártires. Tenemos que restregar a los viejos y machacar en los jóvenes la luz de esas ocho vidas que, pese a la penumbra inicial de su asesinato, alumbró decisivamente la recuperación democrática”, dijo Del Granado.

Hoy, varias personalidades recordaron la masacre de la calle Harrington –actualmente se llama Mártires de la Democracia- y elevaron su homenaje a los dirigentes asesinados. El expresidente Jaime Paz Zamora, quien fue el líder del MIR, informó que encendió ocho velas al pie de la Cruz del Sacrificio y al lado de la Virgen Dolorosa en honor a los asesinados. 

“Nuestro mayor homenaje es el compromiso de iniciar este 2022 la reorganización del sentimiento mirista nacional. Por la Patria y por el Pueblo”, escribió el exmandatario.

El líder de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, también se adhirió al homenaje a los ocho mártires de la democracia. “41 años de la masacre de la Harrington. Mi homenaje a los compatriotas mártires que simbolizan la lucha heroica por la democracia. No la de un régimen autocrático que se ha apropiado de los héroes de Bolivia para perpetuar su autoritarismo y su sectarismo”, escribió el expresidente en sus redes sociales.

También el procurador Wilfredo Chávez se unió al homenaje y pidió justicia para los dirigentes del MIR asesinados. La autoridad rescató la lucha de esa época contra la dictadura de García Meza.

El Senado también emitió una resolución en homenaje a los ocho dirigentes del MIR y publicó en sus redes un video en el que muestra a los asesinados y su legado que dejaron a las nuevas generaciones del país.