La extitular de Desarrollo Rural y Tierras, recuperó su libertad el 20 de noviembre del 2020, fue acusada del desfalco millonario del Fondo Indígena en el 2015.

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11 de enero de 2022, 11:43 AM
11 de enero de 2022, 11:43 AM

Por Marco Curi

La exministra de Desarrollo Rural y Tierras, Nemesia Achacollo, fue vista este lunes, 10 de enero, en el acto de celebración por  el aniversario de la Confederación de Mujeres Campesinas ‘Bartolina Sisa’, en la testera, junto al presidente del Estado, Luis Arce Catacora, situación que generó críticas por parte de adversarios del actual gobierno del Movimiento Al Socialismo (MAS).

La exfuncionaria gubernamental recuperó su libertad el 20 de noviembre de 2020, luego que un juez cambió su situación jurídica de detención domiciliaria que cumplía en la ciudad de Montero.

En aquella oportunidad, su abogado Mirko Suaznábar, dijo que la autoridad judicial tomó en cuenta elementos como el transcurso del tiempo de su detención, estado de salud y que tenía un contrato de trabajo.

Achacollo renunció a su cargo el 31 de agosto de 2015, tras 5 años y medio en el cargo, a causa de las constantes acusaciones contra su persona por el millonario desfalco en proyectos del Fondo Indígena, en la que su persona era la Máxima Autoridad Ejecutiva (MAE) y que, según la Contraloría General del Estado, ocasionó un daño económico al Estado de 71 millones de bolivianos en 153 proyectos inconclusos.

Pasó un semestre después de los hechos y la interventora en la entidad, Lariza Fuentes,   reportó un presunto daño de más de 102,2 millones de bolivianos por 743 proyectos, de los cuales 30 eran fantasmas. Esto habría ocurrido en el periodo desde 2009 hasta  2014.

El 4 de agosto de 2016, Achacollo fue imputada formalmente por el Ministerio Público por los delitos de incumplimiento de deberes, conducta antieconómica y favorecimiento al enriquecimiento ilícito por el manejo del exFondo Indígena (Ex Fondioc).

En esa oportunidad, la Fiscalía señaló que, al ser Presidenta del directorio del Fondioc y "Máxima Autoridad Ejecutiva", tenía una "serie de atribuciones que fueron incumplidas y exigidas en su gestión".

Es así que el 11 de agosto del mencionado año fue recluida en la cárcel de mujeres de Miraflores, de La Paz, tras estar cinco días en celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de Santa Cruz.

Después de seis pedidos de medidas sustitutivas a la detención, la exministra del MAS se benefició con la detención domiciliaria el 9 de noviembre de 2017. Tuvo que pagar la fianza económica de 200.000 bolivianos impuesta en audiencia cautelar el 30 de octubre de ese año.

Sin embargo, el 18 de diciembre de 2019, nuevamente fue enviada al penal de Miraflores, luego de que un juez suspendiera la detención domiciliaria a solicitud del demandante el exdiputado de UD y exviceministro Rafael Quispe.

El 31 de enero de 2020, la Sala Penal Segunda del Tribunal de Justicia de La Paz, negó la apelación de cesación a la detención preventiva, pero el 4 de julio de ese año, Achacollo volvió a conseguir su detención domiciliaria a cumplir en Montero.

De inmediato, el ministro de Gobierno de aquel entonces, Arturo Murillo, anunció un proceso penal contra el juez Alan Zárate, quien dispuso la liberación de Achacollo. Finalmente, en noviembre de 2020, consigue que se le levanten su cautelar de restricción, pero se mantiene el arraigo y el pago de la fianza.    

El 27 de septiembre de 2021, salió a la luz pública una denuncia que dos de sus hijas eran funcionarias públicas. Rebeca Barboza Achacollo trabajaba en el Consejo de la Magistratura y Sara Barboza Achacollo, en la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH).

Achacollo se mantenía con perfil bajo, aunque también se la vio en la campaña del Movimiento Al Socialismo (MAS) para los comicios nacionales y ahora aparece con el mandatario en el aniversario de la Confederación de Mujeres Campesinas ‘Bartolina Sisa’, organización de la que fue su alta dirigente antes de que asuma el cargo de Ministra de Desarrollo Rural y Tierras.