La exmandataria dijo no sentirse bien para asistir a la audiencia y rápidamente organizaron una evaluación médica que concluyó que estaba “estable”

14 de septiembre de 2021, 20:00 PM
14 de septiembre de 2021, 20:00 PM

La expresidenta Jeanine Áñez fue sancionada con tres días de suspensión de recibir la visita de sus familiares, que denunciaron una manipulación de los reportes. La sanción fue dispuesta porque la exmandataria no asistió a una audiencia de apelación. La orden de suspensión de visitas fue emitida por la directora del penal de Miraflores, coronel Maribel Barrenechea Zambrana.


“Que la señora privada de libertad Jeanine Áñez Chávez sea sancionada con prohibición de recibir visitas por un máximo de tres días discontinuos en el mes, de conformidad a lo establecido por el artículo 133 numeral 4 de la Ley de Ejecución Penal”, señala la resolución firmada por la directora del penal de Miraflores.


La exmandataria debía asistir a una audiencia solicitada por una de las partes y ella pidió no asistir por no sentirse bien de salud, rápidamente las autoridades dispusieron la revisión de la exmandataria y concluyó que se encontraba “estable” y no tenía algún impedimento, lo que llevó a la sanción.


La familia denunció que bajo el concepto de “estable” coartan todos los derechos de la ex-mandataria y no toman en cuenta el estado de ánimo en el que se encuentra. Mientras que la defensa también protestó por la sanción. “(El) término (estable es) cómodo para validar todo tipo de abusos, pero en realidad nunca refleja que (Jeanine Áñez) esté bien de salud”, señala una nota de los abogados.


El director departamental de Régimen Penitenciario, Franz Laura, precisó que la medida solo afecta a los familiares y no así a los abogados y médicos que vigilan a la expresidenta. Dijo que hasta hoy, los abogados tenían la posibilidad de impugnar esa decisión, pero no lo hicieron.


Añez acudió a más de 20 audiencias apelando su detención preventiva, pero ninguna fue tomada en cuenta por las autoridades judiciales, quienes se encargan de rechazar una y otra vez los pedidos de cesación a la detención.