Áñez retornó a la cárcel de Miraflores; sufre hipertensión y un síndrome ansioso depresivo
(VEA EL VIDEO) Régimen Penitenciario dice que garantiza la atención a la expresidenta y asegura que está estable. La abogada de la expresidente lamenta que solo se la haya "auscultado"
La expresidenta Jeanine Áñez fue trasladada nuevamente a la cárcel de Miraflores de La Paz, tras abandonar por al menos una hora ese recinto, para acudir a una revisión médica en el Hospital del Tórax.
El director de Régimen Penitenciario, Juan Carlos Limpias, aseguró que la exautoridad está “estable”, pese a que presenta un cuadro de hipertensión y síndrome ansioso depresivo, por lo que requerirá de medicación.
“Ha sido atendida por el cardiólogo especialista, que ratifica nuevamente que la privada de libertad Jeanine Áñez sufre de hipertensión y síndrome ansioso depresivo. Se ha hecho una recomendación de medicación y no ha habido la necesidad de ninguna internación”, dijo el personero.
Norka Cuéllar, una de las abogadas de la exmandataria, lamentó que solo se la haya auscultado para luego devolverla al recinto penitenciario, cuando se requerían otros exámenes para garantizar su salud.
Las declaraciones:
“Lo único que le han hecho es una valoración, (pese a que) fue derivada para que se le haga una valoración cardiológica, un examen psiquiátrico y un examen de sangre, solamente la han revisado y después la han devuelto”, afirmó la jurista.
Desde Régimen Penitenciario se anticipó que mañana jueves laboratoristas irán a la cárcel de Miraflores para tomarle las muestras necesarias a la exjefa de Estado. El jefe de esta institución estatal, Juan Carlos Limpias, dice que se pretende sacarla “por cualquier motivo” de ese recinto, donde cumple detención preventiva.
Áñez permanece tras las rejas desde el 15 de marzo y afronta varios procesos, como el supuesto “golpe de Estado”, caso gases lacrimógenos y otros. A inicios de mes se amplió su detención preventiva por seis meses más, hasta febrero de 2022.
En abril se informó sobre sus problemas de salud y en junio llegó a descompensarse, en medio de un prolongado interrogatorio; entonces presentó una subida de su presión arterial, alteración del ritmo cardíaco y espasmos musculares.
