Carolina Ribera, hija de la exmandataria, dice que sigue sin poder ver a su madre en el penal.

24 de febrero de 2022, 13:41 PM
24 de febrero de 2022, 13:41 PM

Tras 15 días de huelga de hambre, la expresidenta Jeanine Áñez tomo la decisión de suspender la extrema medida. El apoyo que recibió de los cívicos, congregados en la Asamblea de la Cruceñidad, fue clave, dijo la hija de la exmandataria, Carolina Ribera, en un contacto en EL DEBER Radio. “Decirle a todo el país que mi madre, gracias a Dios, al apoyo de la Iglesia Católica, de los sectores, líderes políticos, decidió dejar la huelga de hambre”, expresó al inicio de la entrevista. 

“Si bien fue ayer (miércoles) que tomó la decisión (de suspender el ayuno voluntario), recién hoy (jueves) comenzará a comer de a poco. Me duele verla tan debilitada, sin fuerzas, no podía pararse, se quería caer, se mareaba, tenía crisis nerviosa muy fuertes”, explicó al referirse al estado de salud actual de la exmandataria. 

Comentó que durante 10 días su madre solamente se alimentó de caldos y agua; y que “se encontraba débil, pero seguía firme ante tanta injusticia y ver que golpeen a tus hijos”.

Al ser consultada sobre los motivos que la llevaron a suspender dicha medida, Ribera afirmó que la determinación de Asamblea de la Cruceñidad, que aprobó un paro cívico para el viernes 4 de marzo en apoyo a todos los presos políticos, le devolvió la esperanza. “Ella tiene que recuperarse para continuar con la lucha, es de largo aliento, tenemos mucho camino por recorrer. No puede desgastarse, tiene que recuperarse”, manifestó.

Sobre la etapa de recuperación de Áñez, dijo que es muy difícil porque “no recibe atención de médicos externos al penal”. Asegura que las autoridades penitenciarias mienten y los jueces dan la razón al Gobierno sin tener pruebas. 

Según el último informe clínico oficial de la ex mandataria, son 5 médicos que la asisten, incluyendo uno del IDIF; sin embargo, Carolina Ribera asegura que no es así: “Se inventan informes, nombres y firmas de sus mismos funcionarios. La semana pasada ingresó un médico externo que dice que mi madre se encuentra estable y que no necesita internación. No pudieron pesarla para hacerle una evaluación. En su última audiencia se descompensó, tuvo crisis de nervios”.

Ribera ha denunciado en reiteradas oportunidades que no puede visitar a su madre, que ha sido víctima de malos tratos y agresiones físicas. "Tengo prohibido entrar al penal. Ahora es mi hermano quien ingresa desde el martes, hoy (jueves) entró mi tío”, comentó.

Al ser consultada sobre el informe preliminar del relator de las Naciones Unidas, Ribera dijo que confirma lo que ella ha denunciado todo este tiempo. “La justicia no existe para los bolivianos solo para los que están ligados al abuso de poder de este gobierno”. 

Dijo que el funcionario ha notado que su madre no tiene garantías para asistencia médica por lo que advierte "que cualquier riesgo contra su vida será responsabilidad del Estado".