El Presidente recordó que no puede haber policías que quemen los símbolos patrios y recomendó luchar contra la corrupción para evitar más daño a la imagen policial

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16 de noviembre de 2020, 21:35 PM
16 de noviembre de 2020, 21:35 PM

El Presidente Luis Arce posesionó la noche de este lunes al coronel Máximo Jhonny Aguilera Montecinos como Comandante General interino de la Policía Boliviana. El acto fue refrendado con el Decreto Presidencial 4396 de designación. La máxima autoridad ejecutiva pidió institucionalizar la Policía, "que no sea objeto de persecuciones políticas y que recupere la confianza de la población".

“Se inicia un nuevo ciclo de reinstitucionalización, bajo estos tres ejes esenciales: disciplina, dignidad e institucionalidad”, declaró Arce en sus primeras palabras. Más adelante, dijo que “es menester resaltar que la Policía debe estar siempre, pase lo que pase, al lado de su pueblo y el mandato popular expresado en las urnas”. “Ahora, la institución policial tiene la tarea fundamental de recuperar la confianza del pueblo”, expresó.

Al comandante de la Policía le recordó que dentro de los preceptos para la institucionalización policial hay que combatir la corrupción en el interior de la misma y evitar que se siga dañando la imagen institucional.

“No debemos tener una Policía politizada ni tampoco una Policía que sea un instrumento de persecuciones al que piensa diferente, al que opina diferente, sino una policía institucionalizada. No podemos nunca más tener policías que quemen los símbolos patrios. No podemos tener policías que asuman acciones para ir en contra de un Gobierno democrático y legalmente constituido. Eso no debe volver a ocurrir nunca más”, enfatizó la autoridad.

El acto de juramentación se realizó en la Casa Grande del Pueblo. Además del Presidente Luis Arce estuvieron presentes el Vicepresidente David Choquehuanca, el presidente de la Cámara de Diputados, Freddy Mamani, el presidente de la Cámara de Senadores, Andrónico Rodríguez; y el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.

El nuevo comandante

Por su parte, Aguilera subrayó que tenía en cuenta los tres los pilares que van a regir su gestión al mando de la Policía: disciplina, dignidad e institucionalidad. Pero además, reconoció “errores” dentro de algunos uniformados cuando se desconoció el orden constitucional, refiriéndose al motín en noviembre del año pasado.

“Hemos tenido errores, que probablemente se traducen en falta de doctrina y convicción y en algún momento, algún desentendido. Eran hechos vinculados a la corrupción los que habrían motivado a algunos, no todos, a que hubieran desconocido el orden legalmente establecido”, dijo.

Evidentemente, expresó a la Policía que le tocaba establecer el orden público y restablecerlo cuando es necesario, “pero nos toca hacerlo respetando los derechos constitucionales”.

También apuntó que el delito más grave y la población más vulnerable de la inseguridad es la mujer y se comprometió a aplicar un método de investigación proactiva, con el uso de mejor tecnología, contra la delincuencia.