La festividad se ha replicado en otras partes del país en una celebración con tintes de reivindicación. Se celebra el inicio del año 5.529 dentro de la cultura aimara.

21 de junio de 2021, 7:23 AM
21 de junio de 2021, 7:23 AM

Al grito de ¡jallalla! las primeras autoridades del país recibieron los primeros rayos del sol de este 21 de junio, con un ceremonia en Tiahuanaco. El presidente y el vicepresidente de Bolivia, Luis Arce y David Choquehuanca, respectivamente, compartieron con los amautas aimaras la llegada de un nuevo día que, según el calendario aimara, corresponde al inicio del nuevo año, el 5.529.

Ambas autoridades aguardaron el inicio del día con la esperanza de mejores días en salud y economía para los bolivianos. Rodeados de otras autoridades de Gobierno y de los principales amautas andinos, Arce y Choquehuanca realizaron la ofrenda que tradicionalmente se quema en estas ceremonias.

"Con mucha fe, con mucha esperanza y sobre todo para cada uno de los bolivianos y las bolivianas, pedir salud y ningún contratiempo, así como nos lo auguraron el año pasado nuestros amautas", destacó el presidente Arce.

Ataviados con los ponchos andinos y cubiertos del frío con un chulo de tejido tradicional, ambas autoridades compartieron con unas doscientas personas la ofrenda en el centro ceremonial de Kalasasaya, el templo de la piedra parada.

Por su parte, Choquehuanca reconoció que "hemos venido con mucho respeto a este lugar sagrado para caminar junto a nuestros pueblos, nuestros abuelos, nuestras montañas, nuestros animales, a la Pachamama, a la soberanía de nuestros pueblos", reclamando la relación armónica con la naturaleza.

Las restricciones impuestas por motivo del Covid-19 marcaron una celebración con menor afluencia de personas. 

Tras la ceremonia tradicional, los mandatarios realizaron un acto oficial para realizar el traspaso de la secretaría pro - tempore del Quapag Ñan a Chile que integra a los seis países que son parte de este sistema vial andino (Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú) y trabaja en el desarrollo de la identidad andina.

Arce recordó la vigencia de los principios comunitarios que identifican a la cultura aimara como la reciprocidad, la solidaridad o la redistribución. Antes de entregar la presidencia a la ministra de cultura de Chile, el mandatario expresó su deseo de "construir una patria grande, un continente unido, permitirá avanzar por la senda del bien común".

La celebración se replicó en numerosos lugares del país para recibir el solsticio de invierno que marca, de acuerdo al calendario andino, amazónico y del Chaco, un nuevo año.

La Guardia reunió a un grupo de simpatizantes del actual alcalde del municipio para recibir la primera luz del día. Cochabamba, Sucre, Trinidad y otras localidades realizaron la ceremonia con la mirada puesta en mejores días para la salud.