Ambos se llenaron de elogios. Arce dijo que la unidad es clave porque así se "recuperó la democracia". Huarachi, más directo, manifestó que sólo así se podrá garantizar la continuidad más allá del 2025.

1 de mayo de 2023, 12:39 PM
1 de mayo de 2023, 12:39 PM

El secretario Ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Juan Carlos Huarachi, quien en 2019 le pidió la renuncia al exmandatario Evo Morales y es el único que lo hizo y no fue procesado por el supuesto golpe de Estado, y el presidente Luis Arce, que llenó de elogios y pedidos de unidad al máximo ente de los trabajadores del país, sellaron un pacto de fidelidad, basado en mantener la unidad para que siga en el poder hasta 2030, en el acto de conmemoración del 1 de mayo, Día del Trabajador.

De hecho, cuando el presidente llegó de marchar junto al dirigente desde el Cementerio General a la plaza San Francisco, se sentó en la testera, y un grupo musical interpretó esa canción que lleva en el coro la frase “Lucho y David, un solo corazón” y que lanzó la campaña de los mandatarios para ser los candidatos del MAS para las elecciones presidenciales de 2025. A su lado, el secretario ejecutivo Guarachi movía la cabeza al ritmo de la música y coreaba: “Mi Bolivia está unida, junto a mis hermanos Lucho y David…”

Ya en el acto, Arce entregó a Huarachi tres decretos supremos (DS) aprobados y firmados este 1 de mayo. Primero, el 4926, que tiene la finalidad de promover permisos laborales para la capacitación y formación profesional de los trabajadores.

El segundo, el DS 3927, que tiene el objetivo de que las madres y padres de familia puedan tener permisos para participar de las actividades de homenaje y conmemorativos en actividades específicas señaladas en la norma. Y, el DS 4928 que establece el incremento salarial para la gestión 2023, del 5% al salario mínimo nacional y 3% al salario básico. Casi al final de su discurso, anunció como novedad, el hallazgo de un pozo hidrocarburífero en Santa Cruz.

Huarachi saludó al presidente y lo presentó como “el amigo, el camarada, el primer obrero del Estado Plurinacional de Bolivia”. Cuando le tocó el turno a Arce, el primer mandatario fue ovacionado por los centanares de dirigentes que estaban en la plaza San Francisco. “Lucho, Lucho, Lucho”, y al final, lo despidieron con el “Lucho no estás solo”

Arce Rememoró lo ocurrido en Chicago. En 1886 un grupo de obreros protagonizaron una revuelta por mejores condiciones laborales, entre ellas, la reducción de la jornada de trabajo a ocho horas. Esta rebelión derivó en decenas de muertos y heridos, tres obreros sentenciados a cadena perpetua y cinco condenados a muerte.

“En Bolivia basta con recordar al movimiento obrero campesino, a los mineros que dieron lucha por reivindicaciones a sus derechos. Pasando el año 1952 cuando la clase obrera cobró otra relevancia y desde allí, no podemos dejar de recordar cada momento de la historia de la COB”, apuntó el mandatario.

Posteriormente, dijo, “la derecha aplicó las recetas neoliberales que venían de afuera, con el decreto 21060 (emitido por Víctor Paz Estenssoro, 1985-1989) que instaló el neoiliberalismo, echando a más de 20 mil mineros a la calle, privatizando nuestras empresas, y ese espectro neoliberal estuvo 20 años en nuestro país, soportando gobiernos neoliberales y antiobreros".

Luego reseñó que con la lucha del pueblo boliviano, el 2003, el pueblo decidió erradicar el neoliberalismo “y sacó (de la presidencia) a Gonzalo Sánchez de Lozada, que representaba esa oligarquía. Construimos poco a poco el instrumento político, campesinos, obreros, Pacto de Unidad, implantaron la filosofía del vivir bien, y levantamos este Estado Plurinacional de Bolivia”.

No mencionó ni una sola vez al expresidente Evo Morales, hoy su principal opositor, pero sí se refirió a sus 14 años de Gobierno. “Un 1 de mayo nacionalizamos los hidrocarburos y recuperamos varias empresas que fueron privatizadas. Esos pasos, nunca vamos a olvidar”.

También dejó de lado completamente el hecho de que Huarachi le pidió la renuncia a Morales el 10 de noviembre de 2019, y advirtió que por eso, “luego del ‘golpe de Estado’ la COB, los campesinos los indígenas llevaron al país a nuevas elecciones, e instauró este gobierno que recuperó la democracia”.

Defendió al ente sindical y manifestó que “cuando escuchamos ciertas voces que critican a la COB y a los dirigentes cuando tienen acercamientos con el Gobierno nacional, nosotros decimos que este gobierno emerge de las urnas por el voto del Gobierno y la COB representa a los trabajadores, ¿cómo no vamos a coordinar con ellos si somos un Gobierno por y para el pueblo?”, exclamó.

Por eso, “estamos muy contentos de estar acá. Debemos ratificar los principios de la lucha, los principios de los derechos del trabajador, el trabajador que siempre le dirá no a la opresión, a la esclavitud, y que quiere trabajo, progreso y la industrialización de nuestro país. Compañeros de la COB, nosotros somos los ejecutores, los que llevamos adelante lo que pretende y busca el pueblo, por eso somos el Gobierno de la industrialización de Bolivia”.

Destacó que la industrialización no es un capricho, “sino una necesidad imperiosa para generar trabajo y dar un paso cualitativo al país que todos hemos soñado junto a la COB. Una industrialización que dará valor agregado a nuestros productos, así dejaremos de depender de otros países, para combatir el neoliberalismo y la globalización. Debemos sustituir las importaciones porque sabemos satisfacer nuestras propias necesidades”.

El presidente dijo que la coyuntura de este día se ve marcada por los deseos “de la derecha nacional e internacional de dividir a nuestras organizaciones porque saben que somos fuertes si las organizaciones, sindicatos, federaciones y la COB se mantienen unidos ”, manifestó.

Lo repitió varias veces, como para que quede absolutamente claro. "La fórmula para dejar a la derecha con las manos vacías es avanzar en la unidad monolítica en torno a la COB. No debe haber dudas de los trabajadores del campo y de la ciudad. La única alternativa es la unidad de los trabajadores y de la COB”.

Por su parte, el ejecutivo de la Central Obrera Boliviana llenó de elogios al presidente. “Aclarar algunas cosas que se van diciendo a nombre de los trabajadores. El presidente Luis Arce es un afiliado más de la COB.

Lamentó que critiquen la gestión del Gobierno, y también a la COB. “Damos los pasos de la industrialización, esa es la clave del futuro”, coincidió con el Presidente.

“El 2020 (durante el gobierno de Jeanine Áñez) nuestras empresas fueron paralizadas, no ha sido fácil. Hoy avanzamos firmemente hacia la industrialización. Somos el eje de la economía. Pese a la crisis el Gobierno nos dio un incremento salarial. También este 1 de mayo llamamos a la unidad del pueblo a la cabeza de la COB. Esa unidad monolítica que fue el instrumento de la resistencia del golpe de Estado”, aseveró.

Llamó a la reflexión a los legisladores del MAS “con sus peleas internas. No pongan en riesgo el proceso de cambio que es de los trabajadores y del pueblo boliviano. Debemos estructurar esa unidad granítica. Si nosotros garantizamos unidad política, nuestro presidente deberá garantizar la estabilidad económica. Ya no es proceso de cambio, sino de la industrialización”.

La unidad debe ser garantizada, insistió una vez más, “así no hablaremos hasta el 2025, sino al 2030. Es importante garantizar esa unidad. A nombre de los trabajadores, le agradecemos por los decretos. Ratificamos el compromiso de seguir apoyando su gestión. Se vienen días difíciles, elecciones judiciales, y los trabajadores y obreros haremos seguimiento al trabajo de la Asamblea para cambiar la justicia, para los más pobres, los más necesitados”, finalizó.