Bolivia y España retoman relaciones, pero sin presencia de embajadores
Los analistas consideran que la situación no podía durar más tiempo, tomando en cuenta la historia de las relaciones bilaterales. Álvaro García viajará esta semana a España donde asistirá a conferencias a las que fue invitado, reveló Evo Morales
Dos meses después del incidente que provocó fricciones en las relaciones bilaterales entre Bolivia y España, las cancilleres de ambos países acordaron ayer, en Montevideo, retomar las mismas y elaborar una hoja de ruta para consolidar el acercamiento.
Las ministras de Relaciones Exteriores de España, Arancha González Laya, y de Bolivia, Karen Longaric, se reunieron ayer en Montevideo tras el incidente del 27 de diciembre de 2019 entre la Policía boliviana y una delegación diplomática española que visitaba la residencia de la embajada mexicana en La Paz.
“Tuve una reunión muy cordial y muy productiva con la ministra de Asuntos Exteriores de España Arancha González @AranchaGlezLaya, acordamos estrechar las relaciones entre nuestros países”, señaló la canciller boliviana a través de su cuenta en Twitter.
Mientras que su homóloga española destacó el encuentro, también a través de redes sociales. “Me he reunido con la canciller de Bolivia, Karen Longaric. Acordamos iniciar proceso para normalizar nuestras relaciones”, publicó González Laya.
El 27 de diciembre del año pasado explotó el impasse diplomático luego que cuatro policías españoles fueran sorprendidos tratando de ingresar armados y encapuchados a la residencia de la embajadora de México, María Teresa Mercado. El episodio se prolongó por tres días y el 30 de diciembre, la embajadora Mercado; el cónsul Álvaro Fernández y la encargada de negocios de España, Cristina Borreguero, además de los encapuchados y otros diplomáticos españoles fueron declarados como personas no gratas. Desde entonces las relaciones se habían distanciado.
Al salir de la reunión, la jefa de la diplomacia boliviana destacó el encuentro y dijo que la reunión fue “muy bien, muy cordial, muy amable” y que en ella se habló de la necesidad de encauzar las relaciones en todos los ámbitos, tanto consulares como de cooperación y amistad.
Unas relaciones que subrayó que son muy importantes para el pueblo boliviano porque “España es históricamente muy importante para Bolivia”. La canciller boliviana ratificó el acuerdo en torno a una hoja de ruta bilateral sobre la que señaló que empezarán a trabajar desde hoy mismo.
Sin embajadores
Los analistas Ludwing Valverde y Ericka Brockmann también coincidieron, por separado, en que las relaciones no podían seguir congeladas por más tiempo y que los pasos que da el gobierno de Jeanine Añez, lamentablemente no acabarán en un intercambio de embajadores que sería el paso diplomático ideal.
Brockmann recordó que el Gobierno de transición no puede designar embajador pleno y que esa tarea debe quedar pendiente para el gobierno que asuma después de los comicios. Una de las tareas inmediatas a realizarse debe ser la designación de embajadores entre ambos países.
Valverde recordó que las relaciones con España van más allá de una coyuntura del gobierno de Evo Morales o un episodio de unos encapuchados. Dijo que las relaciones comerciales, principalmente, y el nivel de cooperación de España a Bolivia no puede quedar en el limbo diplomático, como sucede ahora.
Brockamnn abogó para que ese mismo camino sea abordado por las autoridades de México y Argentina que ideologizaron en exceso las relaciones bilaterales. También recordó que en España vive la mayor cantidad de migrantes bolivianos en Europa y que la recomposición de las relaciones tendrá efecto directo sobre los compatriotas.
Viaje de García Linera
De igual manera, en contacto telefónico con las radios del trópico de Cochabamba, el expresidente Evo Morales reveló ayer que Álvaro García Linera viajará a España para brindar dos conferencias internacionales sobre política, precisamente.
Informó que las invitaciones llegaron a él, pero por “razones de atender la campaña” decidieron que sea el exvicepresidente el que viaje a denunciar lo que ocurrió en Bolivia y a demostrar cómo está ahora el país después de que fuera depuesto.
Según los masistas, este viaje también servirá para que el exvicepresidente tenga contacto con los migrantes bolivianos poco antes de la elección en Bolivia, lo que convertiría la visita en el inició de la ofensiva por la campaña electoral del MAS en el Viejo Continente.
