El líder de Creemos se presentó ayer a declarar en la Policía. El acto fue suspendido. En la Policía adujeron que se debió a motivos de seguridad. Había mucha gente

11 de marzo de 2021, 22:43 PM
11 de marzo de 2021, 22:43 PM

Luis Fernando Camacho demoró siete minutos desde su llegada a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) hasta su salida de esa sede policial, ubicada en el tercer anillo de la avenida Santos Dumont. 

El líder de Creemos y virtual gobernador electo de Santa Cruz caminó en medio de una multitud, a las 11:57, para presentarse a declarar por una investigación interna que sigue la Policía de Tarija en contra del coronel Aníbal Rivas, que respaldó las movilizaciones de 2019 para exigir la renuncia del entonces presidente Evo Morales.

“La declaración fue suspendida”, informó Camacho a las 12:04, que parecía surfear sobre las olas de banderas cruceñas y de su agrupación política antes de abordar la vagoneta Nissan, color blanco, que lo esperaba en la calle.

“Resulta que la única condición para que me tomen la declaración es que no venga absolutamente nadie”, gritó Camacho a los periodistas que se encontraban en medio de las personas que se concentraron en los alrededores de la Felcc para ofrecer su apoyo al líder de la agrupación Creemos.

Los seguidores de Camacho se instalaron desde las primeras horas de la mañana en las calles y aceras aledañas a la sede policial. Algunos llegaron en marchas desde diferentes puntos de la ciudad, portando carteles de respaldo al expresidente cívico ahora convertido en político; otros ondeaban banderas y lanzaban petardos. Una mujer dijo que se movilizó desde el octavo anillo de la doble vía a La Guardia para impedir que se cometiera un abuso contra uno de los principales líderes de las protestas cívicas de octubre y noviembre de 2019 que provocaron la renuncia de Evo Morales a la Presidencia, después de que fuera acusado por la OEA de incurrir en fraude electoral.

Versión de la Policía

En la Policía ratificaron que la declaración fue suspendida debido a la presión que ejercía la multitud que se concentró en los alrededores de la Felcc para respaldar al virtual gobernador electo de Santa Cruz.

El jefe de la Dirección Departamental de Investigación Policial (Didipi), Diego Torrejón, afirmó que Camacho fue invitado en calidad de testigo en un proceso administrativo disciplinario que se sigue en Tarija en contra del coronel Rivas, pero el acto fue suspendido por razones de seguridad, debido al considerable número de personas que acudió a la policía.

Antes, en su contacto con la prensa, Camacho aseguró que con este tipo de acciones se busca amedrentar a la ciudadanía. Sin embargo, advirtió de que “el pueblo no dejará solo a esa gente que luchó por la libertad y para evitar que se consumara un fraude electoral, como el coronel Rivas”.

Según el líder de Creemos, desconoce cuál es la finalidad de esta investigación porque la Didipi lo convocó para conocer si saludó o no al oficial Rivas, cuando en “verdad le agradecí al coronel lo que hizo por los bolivianos en nombre de la Policía”. Ratificó que con estos mecanismos el oficialismo busca amedrentar a los ciudadanos.

En esa misma línea, el jefe de bancada de Creemos en la Cámara de Diputados, Erwin Bazán, afirmó que el Gobierno mantiene la lógica de perseguir a los opositores políticos. “Utilizan a los policías, a fiscales y jueces para amedrentar y perseguir a sus adversarios políticos, pero no entienden que este pueblo ya les perdió el miedo”, señaló Bazán.

Desde La Paz, la senadora Centa Rek, también de Creemos, dijo que están enviando un mensaje de amedrentamiento a Camacho y a los opositores, pero en caso de que se produzca la detención del líder de su partido sería como “echar gasolina al fuego” porque, según ella, el pueblo está cansado de los abusos de poder.

El martes, el vocero del Gobierno, Jorge Richter, ubicó a Luis Fernando Camacho entre las autoridades electas por el voto popular del domingo 7 de marzo que forman parte del grupo de los “rupturistas”, junto a Manfred Reyes Villa, alcalde electo de Cochabamba, e Iván Arias, burgomaestre electo de La Paz.

El portavoz, aseveró que la “actitud rupturista” de Camacho, en este caso, puede romper el sistema democrático y hasta confeccionar un golpe de Estado. “Son personalidades agresivas con el sistema democrático”, divulgó el martes el diario electrónico Oxígeno.