65% de las muertes por cáncer se registran en países menos desarrollados. Una campaña, de alcance mundial, propone a la población involucrarse para consolidar un acceso digno

4 de febrero de 2021, 10:05 AM
4 de febrero de 2021, 10:05 AM

La unión Internacional de Lucha Contra el Cáncer (UICC) impulsa una campaña mundial en la que invita a la población a actuar ahora para vivir un futuro sin cáncer. Desde la UICC se quiere celebrar el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer con un mensaje de compromiso y esperanza para revertir la imagen negativa que se asocia frecuentemente a esta enfermedad.

“Yo soy… y voy a …” sintetiza la mirada integradora que plantea la UICC. La campaña se ha convertido en una invitación a todas las instituciones y personas para que demuestren su solidaridad con los pacientes de cáncer a través de un compromiso que ayude a cambiar las vidas.

Cada año, según las estadísticas que ofrece la UICC, 9.6 millones de personas fallecen de cáncer. Además, el 65% de estas muertes se producen en las regiones del mundo menos desarrolladas.

Las experiencias aprendidas a lo largo de la pandemia, señala Rosario Calle (representante de familiares y pacientes con Cáncer en La Paz), han permitido un mayor acercamiento entre autoridades y pacientes. Tanto desde la sociedad civil como desde las instancias de gobierno, se han aunado esfuerzos para superar las dificultades y sostener la atención a los pacientes.

Si bien la prioridad está centrada en el coronavirus, se ha logrado considerar también la atención para “otras patologías que son graves y no pueden esperar a sus tratamientos”, complementa ‘Charito’, como la conocen los pacientes.

Según las proyecciones de la organización, en el 2040 se alcanzarán 16.5 millones de personas fallecidas por año si no se revierte esta tendencia. Ante este panorama, la UICC considera que el cáncer es “un problema humano y de salud fundamental”.

Así lo considera también el psicólogo oncólogo Eduardo Velasco, que trabaja en el Instituto Oncológico del Oriente Boliviano. “El cáncer no sólo es una enfermedad, es un evento que llega a la vida de una persona y afecta a todo su entorno: a su familia, a sus amigos, a su trabajo. Desafía el futuro de las personas”, indica.

Además, señala que la enfermedad afecta también al entorno familiar del paciente, ya que “las necesidades no se acaban con los medicamentos. El cáncer atenta contra el cuerpo, la mente, la autonomía de las personas, la economía familiar”. 

Pero mas allá de la contundencia de estas realidades, la campaña de la UICC se convierte en un camino de esperanza para revertir esta realidad y vencer al cáncer con el apoyo social conjunto. “Es momento de actuar para un futuro sin cáncer” estimula la página web creada para unificar todos los mensajes y acciones de la campaña.

Para Calle, “todos deberíamos realizar un chequeo médico de forma anual” como medida de prevención. Al igual que los médicos, insiste en que la detección precoz es la mejor manera de controlar y revertir la enfermedad.

El camino de la prevención, de la detección temprana y del acceso adecuado a los tratamientos forma parte de la ruta para salvar hasta 3.7 millones de vidas. Al menos 1/3 de los casos de cáncer en el mundo se pueden prevenir a través de los hábitos de vida y otro tercio se podrá curar si se detecta de forma temprana y recibe un tratamiento correcto.

La UICC reconoce que el gran aporte de la ciencia para mejorar los tratamientos contra el cáncer, lo que permite mostrarse optimistas de cara al futuro. La posibilidad de superar los miedos que la enfermedad produce forma parte fundamental para garantizar el diagnóstico temprano y el acceso adecuado a los tratamientos.

Velasco también valida la importancia de la lucha integral contra el cáncer “centrada en las necesidades de los enfermos y de sus familiares”. Sugiere a las autoridades que se diseñe un “sistema adecuado para nuestros enfermos” y que ofrezca una atención digna y ágil para todos.

Además, el psicólogo boliviano valora el momento por el que “los enfermos están pasando; el peor momento de sus vidas”. Y ante esta emergencia, “merecen una atención con calidad y humanidad”.