Censistas detectan dificultades en las zonas rurales y "gran cantidad de casas vacías" en el primer día del censo experimental
La directora del Censo, aclaró que este trabajo no era para ver la población existente sino evaluar el trabajo que desarrollaron en este tiempo
“El problema de la migración es más grande que el que esperábamos, el problema de la cantidad de gente, de casas vacías que se encuentran, es mucho más grande de lo que uno ve”. Esas fueron las palabras del director nacional del Instituto Nacional de Estadística (INE), Humberto Arandia, al resumir la situación en las áreas dispersas del municipio de Capinota, en el primer día de censo experimental.
Este sábado inició una prueba piloto del censo que sirvió para evaluar las cualidades del mismo y ver los problemas que tienen los censistas. La evaluación de la primera jornada destapó diversas dificultades de los protocolos que tendrá el Censo de Población y Vivienda de marzo de 2024.
El municipio fue dividido en cinco áreas. Dos de ellas eran zonas dispersas. Para cubrir todo el terreno se contó con 978 censistas. Desde las 08:15 iniciaron la prueba que concluyó a las 18:00 con la entrega de las cajas con los formularios de 58 preguntas que lanzaron a la población. Todas las áreas tuvieron avances en la entrega de las cajas, excepto las áreas 2 y 5, las zonas dispersas, que no entregaron ninguna caja.
“El área 2 y área 5 que son dispersos, no hemos podido concluir el cierre de las cajas, esto demuestra la asimetría del comportamiento que existe entre lo que es el área urbana y el área rural, en el área urbana a pesar de todos los esfuerzos el trabajo sigue y va a continuar hasta que cerremos, y en el área dispersa, no sabemos, es por eso que hacían falta los tres días por las dificultades que se tiene del traslado”, dijo el director del INE en conferencia de prensa.
El director puso como ejemplo la comunidad de Ornuma donde la mayoría de las casas estaban vacías, incluso hubo dificultades para poder conseguir los censistas. Aseguró que este problema los obligará a mejorar los protocolos para 2024 y mejorar los estándares de seguridad.
La directora del Censo de Población y Vivienda 2024, Martha Oviedo, aclaró que este recuento experimental no tenía el objetivo de realizar el recuento de la población sino observar los protocolos que se ensayaron en teoría y que debían ser aplicados en el campo.
“Como dice su nombre indica era experimentar todo nuestro material, cómo están las preguntas, cómo se han desarrollado los tiempos que hemos calculado, la cantidad de trabajo que se ha dado a cada censista, eso es lo que hemos podido comprobar ahora”, aseguró.
Todo lo que sucedió este sábado y lo que ocurrirá en los siguientes dos días será evaluado en agosto. En septiembre, se dará a conocer un informe de los aciertos y las correcciones que deben realizarse de cara al Censo 2024.
