Citan al padre de Camacho tras tensión en la efeméride y las fracturas se agudizan

Las aguas no se apaciguaron el día después de la tormenta. La Fiscalía hizo llegar desde La Paz una citación contra el entorno del gobernador, Luis Fernando Camacho, la autoridad que quedó en el foco de atención del país por los incidentes que se registraron durante el homenaje a los 211 años
de gesta libertaria de Santa Cruz.

José Luis Camacho Parada, padre del gobernador cruceño, fue retenido ayer cuando pretendía abordar el avión que lo llevaría a Estados Unidos. Una “alerta migratoria se activó” tras pasar los controles en Viru Viru.

Contrariado, el empresario José Luis Camacho relató a los periodistas, luego de pasar toda la mañana en Viru Viru, las circunstancias en las que se frustró su viaje al exterior. Dijo que los funcionarios del aeropuerto le ordenaron que “espere al fiscal”. Llegó Edwin Jamachi, representante del Ministerio Público en Warnes, y le notificó con un citatorio emitido en
La Paz. Debe presentarse en esa ciudad a las 10:00 del 5 de octubre.

Se trata de una declaración “informativa” en calidad de “sindicado” por un caso vinculado a la crisis de 2019. El documento señala que es por un proceso promovido por la exdiputada Lidia Patty (MAS) por los supuestos delitos de “conspiración, sedición y terrorismo” que se pudieron cometer en octubre de 2019. 

Se trata del mismo caso por el que la expresidenta Jeanine Áñez está recluida desde marzo, aunque contra la exmandataria existen otras dos causas abiertas, pero por la vía ordinaria.

Camacho Parada señaló a los periodistas que “nunca fue notificado” por este caso y lamentó que se trate de “un atropello” en su contra y el debido proceso. Dijo que evalúa con su abogado cómo responderá. “Es un abuso, una barbaridad y un atropello”, resaltó.

A su vez, Roberto Castedo, el abogado de Camacho (padre) afirmó que, con esta acción, se vulneraron los derechos constitucionales, porque su defendido no tenía conocimiento de la causa.

El jurista relató que hubo una “alerta migratoria” cuando Camacho Parada ya estaba en el aeropuerto. Precisó que esta restricción se ejecuta por una autoridad competente tras una cautelar.

Más temprano, el gobernador denunció desde sus cuentas en
redes sociales que a su padre no le permitieron abordar un vuelo para trasladarse a Estados Unidos. “No hay ninguna orden judicial, su delito es ser familiar del gobernador de Santa Cruz. Digan si eso no es abuso y revancha”, escribió la autoridad departamental en su cuenta en Twitter.

Patty (MAS) denunció en varias ocasiones a Camacho y su padre José Luis Camacho por delitos de terrorismo, conspiración y sedición durante la crisis política de 2019, que estalló tras denuncias de fraude electoral que el oficialismo no admitió. Anteriormente, exautoridades y personas vinculadas con empresarios como Samuel Doria Medina fueron retenidos en el aeropuerto en momentos previos a viajes de carácter internacional.

Rupturas

El incidente se produce luego del accidentado homenaje de la efeméride de Santa Cruz, cuando el gobernador cerró el acto sin ceder la palabra al vicepresidente David Choquehuanca, quien estaba en ejercicio de la Presidencia ante la ausencia temporal de Luis Arce por el viaje que cumplió a la Asamblea de Naciones Unidas.

Además, un grupo de dirigentes cívicos bajaron del mástil la wiphala, la bandera originaria que enarbolan indígenas de las tierras altas de Bolivia, Chile y Perú. Ante este escenario, el ministro de Justicia, Iván Lima, anunció procesos legales contra las personas que sean responsables de esa ofensa a un símbolo patrio. A esa petición se sumaron varias voces para cuestionar al gobernador de Santa Cruz por promover esa acción.

“Es una afrenta al símbolo patrio que constituye la wiphala. Lo que
ha ocurrido es un delito y se van a presentar las acciones penales
correspondientes”, señaló el ministro en una rueda de prensa.

Horas después, el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo,
anunció que esa querella irá contra dos mujeres, entre ellas una asambleísta. “El día lunes vamos a presentar una denuncia penal en
contra de aquellas personas que hubieran bajado y ultrajado este
símbolo patrio”, adelantó el ministro al canal estatal Bolivia TV.
Del Castillo indicó que la asambleísta no representa “el sentir del
pueblo cruceño”, porque la ley de los habitantes del departamento
de Santa Cruz es la hospitalidad.

“En ningún momento estuvo prevista en la agenda la iza de la wiphala. Sin embargo, en pleno desarrollo del acto cívico, el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, saca de su bolsillo una wiphala y se la hace llegar al presidente en ejercicio, David Choquehuanca (hay imágenes grabadas en un video), y éste procede a izar la bandera rompiendo el protocolo, generando una situación irregular, que no estaba en la agenda. Fue una clara acción de imposición”, señaló la Gobernación en un comunicado.

En esa línea, la senadora Centa Rek, de la alianza Creemos, dijo que la reacción fue porque el MAS “vino a imponernos su agenda ideológica, cuando los cruceños defendimos la bolivianidad. Choquehuanca superpuso la wiphala a la bandera boliviana y esto nos pareció un atropello increíble”.

Para el politólogo Marcelo Arequipa, lo sucedido el viernes en la plaza 24 de Septiembre agrava “la polarización social” del país. “Y esto tiene que ver con la reaparición de las fracturas sociales e históricas que tenemos como país. En este caso es el tema del regionalismo y el tema de lo étnico”, señaló el experto, quien consideró que, en esta ocasión, Camacho puede salir perdiendo frente a una estrategia aplicada por el MAS en distintos frentes.

“Camacho, al haber permitido que ocurrieran todos los actos del viernes, le dio al Gobierno la perfecta excusa para que sea posicionado como regionalista y racista para todo el país”.

Marcelo Arequipa consideró ayer que el “Gobierno ha ido con una clara intención de mover los ánimos, porque está enfocado en seguir con la
agenda política de 2019”.

Mientras que el sociólogo Franco Gamboa también señaló que la estrategia del Gobierno ganó, pero también las fracturas. “El MAS está aprovechando cualquier resquicio público; cualquier espacio político para hacer campaña en favor del golpe y eso está acrecentando la tensión política”, manifestó. Estas acciones, empero, pueden “ser de doble filo” y desgastar al Gobierno, añadió.